El líder norcoreano Kim Jong Un quiere que el papa Francisco visite Corea del Norte, un país oficialmente ateo, aseguró el martes Corea del Sur.
Durante una cumbre celebrada el mes pasado, Kim dijo al presidente surcoreano Moon Jae-in que el pontífice sería recibido con “entusiasmo” en la hermética nación, informó la oficina presidencial surcoreana en un comunicado.
Kim se ha involucrado en labores diplomáticas en los últimos meses en lo que se considera un intento de aprovechar su polémico programa nuclear para obtener que Occidente le reduzca las sanciones económicas y la presión militar.
Corea del Norte controla férreamente las actividades religiosas de su pueblo y una invitación similar realizada al entonces papa Juan Pablo II tras una cumbre intercoreana en 2000 nunca derivó en una reunión. El Vaticano insistió entonces en que la visita papal solo sería posible si se aceptan sacerdotes católicos en el país.
Moon, quien visitará el Vaticano la semana próxima, prevé transmitir el deseo de Kim de recibir al papa. Moon dijo el lunes que prevé una visita próxima de Kim a Rusia y posiblemente una cumbre con el primer ministro japonés, Shinzo Abe.
El Vaticano no hizo declaraciones sobre la posibilidad de una visita del papa a Corea del Norte, pero poco después de conocida la noticia, la oficina de prensa confirmó en un comunicado que el papa recibirá en audiencia al presidente surcoreano el 18 de octubre.
El vocero del Vaticano, Greg Burke, dijo que la audiencia será al día siguiente de una misa por la península coreana, que oficiará en San Pedro el secretario de Estado Petro Parolin.
Una invitación similar realizada al entonces papa Juan Pablo II nunca derivó en una reunión. El Vaticano puso como condición que Norcorea aceptara a sacerdotes católicos en el país.