Funcionarios de la Empresa Eléctrica Nacional de Venezuela (Corpoelec) en Carabobo, señalaron que la crisis eléctrica en ese estado venezolano pudo evitarse con los trabajos de mantenimiento en Planta Centro, contratados y pagados a la Unión Eléctrica de Cuba, pero que no se culminaron, publica este jueves el diario local El Carabobeño.
Según explica el artículo, la idea de contratar a la empresa cubana fue del entonces presidente de Pdvsa, Rafael Ramírez, quien sugirió a Hugo Chávez que se firmara el acuerdo, con el compromiso de que las labores de mantenimiento culminaran en el 2012.
“Jesse Chacón, ministro de Energía Eléctrica en ese momento, confirmó una y otra vez que para ese año estaría repotenciada esa máquina capaz de generar hasta 400 megavatios, pero hasta la fecha sigue apagada”, afirma el escrito.
En Corpoelec, adscrita al Ministerio del Poder Popular de Energía Eléctrica y creada en julio de 2007 por Hugo Chávez, solo queda una docena de trabajadores cubanos, casi todo el equipo se regresó a la isla, afirma el dirigente sindical Oswaldo Salcedo.
Salcedo explicó que la planta desalinizadora tampoco está en funcionamiento por una falla en el software. Adquirir uno de repuesto costaría 17 millones de dólares.
El negocio con Cuba fue un total fracaso, denuncia el líder sindical, y explica que Venezuela pagó 1.300 millones de dólares al gobierno de La Habana para la compra de un parque de electrógenos de generación distribuida que solo funciona al 28 % de su capacidad.
De los 865 megavatios prometidos, la planta está generando solo 241. Según Salcedo, “eran equipos chatarras que Cuba compró en Europa a bajo precio, las repotenció y después vendió a Venezuela en montos similares a plantas nuevas”.
En febrero de este año, los sindicalistas solicitaron una investigación sobre esas las plantas de generación distribuida, adquiridas por Corpoelec durante la gestión de Argenis Chávez, nombrado en 2011 viceministro de Desarrollo Eléctrico.
Hoy la región se enfrenta al racionamiento extremo. El sindicalista reconoce que no hay otra forma de enfrentar el problema, pero las medidas del gobierno son contradictorias.
Salcedo se cuestiona que el gobierno declare días no laborables para la administración pública y los viernes para el sector educativo con el fin de ahorrar electricidad. Según explica, el mayor consumidor es el residencial, “entonces es ilógico mandar a la gente a sus casas”.
Pero si el gobierno hubiese invertido recursos en el mantenimiento de las termoeléctricas, el racionamiento que hoy afecta al 80% del país no habría sido necesario, explica Juan González, secretario del sindicato de Corpoelec en Aragua.
“Desde diciembre del año pasado Planta Centro no está produciendo ni siquiera un kilovatio. Si tuviéramos las plantas termoeléctricas en funcionamiento, tengan la plena seguridad de que el pueblo venezolano no estaría sufriendo los racionamientos que padece”, afirmó.
¿Que dice el gobierno venezolano de Planta Centro?
Una nota publicada en el sitio en Internet del gobierno de Venezuela destaca las labores de mantenimiento en Planta Centro, y las pruebas de funcionamiento en la caldera de la Unidad 5.
"El compromiso entre la Unión Eléctrica de Cuba (UNE) y CORPOELEC se puso de manifiesto el pasado 14 de abril con las primeras pruebas de encendido de quemadores de la caldera, a fin de poner en servicio la Unidad 5 de Planta Centro, en Carabobo", afirma la nota.
Según la publicación oficial, se estima que “a mediados del segundo semestre de este año se efectúen las pruebas finales, que conlleven a hacer los armados y pruebas funcionales, iniciando el encendido, puesta en servicio de la caldera y pruebas de rodajes de turbina a finales del mismo semestre”.
Entretanto, en la estatal Corpoelec las condiciones de trabajo dejan mucho que desear: “No tenemos botas, guantes ni repuestos”, dice Salcedo. El descontento de los trabajadores es general, en un panorama que se asemeja cada vez más a su otrora socio comercial.