Patrulleros estatales de Texas detuvieron la noche del 23 de mayo cerca de Raymondville, no muy lejos de la frontera mexicana, a dos personas de origen cubano, responsables del contrabando de 86 inmigrantes indocumentados a los que llevaban ocultos en el remolque de una rastra.
Los detenidos en la carretera I-69E, a solo 80 kilómetros de la frontera, fueron identificados como Jorge Alfredo Rodríguez, de 44 años, residente en Miami y chofer del tractocamión, y Danay Rego-Plasencia, de 32, residente en Houston, quién lo seguía manejando un automóvil Hyundai Elantra.
Los dos han sido acusados de albergar y ocultar a inmigrantes indocumentados. Según las autoridades ambos son cubanos. Un juez federal le negó la fianza el martes a Rodríguez y le impuso a Rego-Plasencia 75 mil dólares. Ella salió en libertad provisional tras pagar el porcentaje correspondiente. Aún no hay fecha para una nueva audiencia del caso.
Documentos de la corte indican que las autoridades tienen a cuatro testigos que identificaron a los encartados.
Presuntamente, los ilegales permanecieron dentro de una propiedad hasta que fueron trasladados al camión de carga, con el fin de llevarlos hacia el norte de Texas. Los inmigrantes, entre ellos cuatro menores no acompañados, procedían de Honduras, Guatemala, El Salvador, México y Nicaragua, informó en un comunicado la policía de Aduanas y Protección de Fronteras, CBP.
Los policías comenzaron a seguir la trayectoria de la rastra después de ser avisadas por un ciudadano sobre la actividad sospechosa en una residencia de Álamo. No está claro por cuánto tiempo habían estado viajando.
El camión fue identificado y seguido por los patrulleros desde la ciudad de Donna, unos kilómetros al norte del fronterizo Río Bravo. Luego, alrededor de las 10 pm detuvieron el vehículo, y cuando se disponían a revisarlo escucharon gritos adentro del remolque pidiendo que los sacaran.
La investigación señala que los indocumentados lograron abrir un boquete en el techo de la caja del camión, y algunos salieron por allí y después bajaron usando una escalera, quedando bajo custodia de la Patrulla Fronteriza.
Se les brindó asistencia médica, ya que a pesar de que la caja tenía refrigeración algunos presentaban signos de deshidratación debido al intenso calor en la región.
Los inmigrantes estaban "hacinados como sardinas en lata" dentro del remolque refrigerado, dijo Frank Torres, gerente de servicios médicos de emergencia del condado de Willacy. Además, compartían el espacio con una carga de aguacates.
En una conferencia de prensa el miércoles, Carla Provost, directora interina de CBP en el área señaló “esta es nuestra peor época del año cuando se trata de rescates y, desafortunadamente, muertes a lo largo de la frontera suroeste, debido a las altas temperaturas".
El pasado verano boreal, una operación de contrabando de personas resultó en la muerte de 10 inmigrantes indocumentados en San Antonio. Al menos 39 personas, algunas ya muertas y muchas agonizantes, fueron encontradas en un remolque cerrado sin aire acondicionado. Algunas tenían apenas 15 años.
En agosto de 2017 un grupo de 17 inmigrantes indocumentados fue rescatado por oficiales del Departamento de Policía de la ciudad de Edinburg, en Texas, tras horas de encierro dentro de un tractocamión, también conducido por dos cubanos.
