El periodista independiente cubano José Luis Tan Estrada fue citado e interrogado por la Seguridad del Estado en Camagüey el pasado 9 de octubre. Según explicó, dos agentes identificados como Cristian y Laura lo amenazaron por su trabajo en medios independientes y su participación en campañas de donación para personas necesitadas en la isla.
Durante el interrogatorio, los agentes lo acusaron de incurrir en “propaganda contra el gobierno” y de estar en riesgo de cometer delitos relacionados con mercenarismo bajo la nueva Ley de Comunicación Social. El agente Cristian le mostró un expediente con sus publicaciones en redes sociales y medios independientes, además de mencionar que sería mejor que usara su pasaporte para que abandonara el país.
Tan Estrada, de 26 años, trabajajaba como profesor de periodismo pero fue despedido de la Universidad de Camagüey en 2023 por sus críticas al gobierno cubano.
Desde entonces ha colaborado con medios independientes como Cubanet, Diario de Cuba y Yucabyte, lo que lo ha convertido en un objetivo recurrente de las autoridades. El periodista denunció que las amenazas también mencionaban a sus actividades en campañas de donación, las cuales, según los agentes, buscan “degradar la sociedad”.
El reportero ha sido detenido y hostigado en varias ocasiones este año. En julio, fue arrestado antes del aniversario de las protestas del 11 de julio (11J) de 2021, y en abril fue detenido en La Habana, donde estuvo recluido en Villa Marista, el cuartel principal de la Seguridad del Estado. Ha sido objeto, además, de multas y detenciones, siendo sancionado con 3 mil pesos por supuestamente infringir el Decreto-Ley 370, una normativa utilizada para penalizar a los periodistas independientes.
La presión contra el periodismo independiente ha aumentado en Cuba en las últimas semanas, afectando a medios como elTOQUE, Cubanet y Periodismo de Barrio. La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha expresado su preocupación por esta escalada represiva.
A pesar de las constantes amenazas, José Luis Tan Estrada ha reiterado que no dejará de ejercer el periodismo. “Durante todo este tiempo he aprendido que no se puede dialogar con el Estado. Todo fue un monólogo de su parte, pero dejé claro que no voy a dejar de hacer periodismo”, declaró el comunicador.
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