La Cervecería Polar, ícono del mayor grupo empresarial de Venezuela, anunció este jueves que dejará de producir cerveza ante la falta de materia prima, lo cual afectará a unos 10.000 trabajos directos, en medio de la severa crisis económica que golpea al país.
En un comunicado titulado "Sin materia prima no podemos producir", Cervecería Polar informa a clientes y consumidores que sólo tiene "cebada malteada para producir hasta el 29 de abril", debido a que no cuenta con divisas para reponer inventario y pagar a sus proveedores, ante el control cambiario estatal que rige en Venezuela.
"Dada esta circunstancia, nos vemos obligados a suspender la producción de cerveza y malta hasta lograr el acceso a las divisas necesarias para la procura de la materia prima", advirtió la empresa, la principal del mercado cervecero del país.
La compañía precisó que esta medida impactará a 10.000 trabajadores directos y más de 300.000 fuentes de empleo indirectas entre franquiciados, transportistas, clientes y proveedores en todo el país.
"Hemos alertado al país de la grave situación que confrontamos y hemos agotado también todas las opciones de endeudamiento con nuestros proveedores internacionales, siempre a la espera de que el Gobierno Nacional atienda el problema de la deuda", señaló la empresa, que no precisó datos del volumen de producción que perderá.
Polar, la principal productora de cervezas y alimentos del país y cuyo accionista mayoritario es el venezolano Lorenzo Mendoza, ha sido acusada por el presidente venezolano, Nicolás Maduro, de sabotear la atribulada economía venezolana al supuestamente detener sus producción.
Del grupo empresarial Polar, creado hace 75 años, salen la mayoría de productos que consumen los venezolanos, como la harina de maíz con la que hacen las arepas -el plato típico del país-, las gaseosas, quesos, golosinas, salsas, cereales, atunes y muchos otros.
Mendoza es fustigado públicamente por Maduro, y en octubre pasado diputados oficialistas lo denunciaron ante la Fiscalía por traición a la patria y usurpación de funciones, al haber presuntamente suplantado al gobierno en aparentes tratos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para que intervenga en la crisis del país.
Venezuela, el país con las mayores reservas de petróleo del planeta, tiene la inflación más alta del mundo (180,9% en 2015) y una escasez de alimentos y medicinas que provoca largas filas en supermercados y farmacias.