El secretario de Estado Norteamericano, Mike Pompeo, en nota emitida en el día de hoy, 20 de julio, se ha referido al 21 aniversario de la persecución, por parte del régimen de la República Popular China, (RPD) a los miembros y simpatizantes del movimiento Falun Gong que, literalmente significa Práctica de la Rueda de la Ley, fundado y enseñado por primera vez en China en 1992 por Li Hongzhi.
“Desde 1999”, señala Pompeo, “el Partido Comunista de China (PCCh) ha tratado de erradicar Falun Gong, una práctica espiritual originaria de China, y a sus practicantes pacíficos y defensores de los derechos humanos que han luchado por su derecho a practicar sus creencias”.
En principio, la práctica de Falun Gong fue más o menos tolerada por las autoridades chinas, pero, a mediados de la década de los 90, el movimiento despertó la suspicacia de importantes esferas del poder que empezaron a sentirlo como una amenaza al orden establecido y la represión no se hizo esperar.
Veintiún años de persecución a los practicantes de Falun Gong es un tiempo demasiado largo y debe terminar”.
“Extensas pruebas muestran”, afirma Pompeo, “que el gobierno de la RPC continúa reprimiendo y abusando de esta comunidad hasta el día de hoy, incluidas las denuncias de torturas de practicantes de Falun Gong y la detención de miles”.
A mediados de los 90 se considera que, al menos 70 millones de persona dentro del país, eran miembros activos de Falun Gong, cuya independencia del estado resultaba intolerable para las autoridades, que carecían del control habitual en un importante y creciente sector de la ciudadanía aunque, ya en 1996, su fundador, Li Hongzhi, se vio en la necesidad de emigrar y establecerse en los Estados Unidos
“El año pasado”, recuerda el secretario de Estado, “recibí a la Dra. Yuhua Zhang, uno de los sobrevivientes de la campaña de persecución a Falun Gong por parte del PCCh. Después de sobrevivir a lo que describió como tortura mientras estaba en un campo de trabajos forzados y una prisión en China, aboga por la liberación de su esposo encarcelado, Ma Zhenyu, quien está sufriendo meses de torturas porque se niega a renunciar a sus creencias sobre Falun Gong”.
Más adelante, Mike Pompeo hace un llamado a los gobernantes de China para que cesen la persecución, el encierro y las desapariciones forzosas contra los practicantes de esta filosofía de vida:
“Hacemos un llamamiento al gobierno de RPC para que ponga fin de inmediato a su abuso y maltrato depravado contra los practicantes de Falun Gong, libere a los encarcelados debido a sus creencias, como Ma Zhenyu, e investigue el paradero de los practicantes desaparecidos. Veintiún años de persecución a los practicantes de Falun Gong es un tiempo demasiado largo y debe terminar”.