El realizador Bob Yari está feliz de haber filmado Papa en los escenarios reales y casi intactos donde vivió Ernest Hemingway en Cuba y lograr, sin proponérselo, la primera película de Hollywood rodada en la isla en los últimos 60 años, según dijo el 6 de diciembre a la agencia AFP.
"Esta es la primera película de Hollywood que ha sido filmada en Cuba en más de 60 años. Y fue muy difícil lograrlo, pero estamos muy contentos de haber sido capaces de rodar en Cuba y trabajar con cubanos", dijo.
Otras cintas famosas cuyas tramas se desarrollan en Cuba, como El Padrino II y La Habana, tuvieron que ser filmadas en República Dominicana.
Yari, de origen iraní y 54 años, presentó la película el sábado dentro de la programación del 37 Festival del Cine Latinoamericano que transcurre en La Habana, y el domingo, acompañado de su equipo, narró su experiencia.
La cinta, rodada en la isla entre abril y mayo de 2014, cuenta tres años de la vida de Hemingway en la época que sufrió una fuerte depresión que, según sus estudiosos, lo llevó al suicidio unos años después.
Yari dijo que tuvo que lidiar con las restricciones que impone el embargo estadounidense a la isla desde 1962 hasta obtener una licencia, que le permitió a su equipo viajar y trabajar en los escenarios casi intactos donde vivió Hemingway en esos años, como su casa de la Finca Vigía, el bar Floridita, el hotel Ambos Mundos, entre otros.
El cineasta agradeció la amplia colaboración de las autoridades cubanas, que le abrieron la puerta de la casa, actual museo, y del resto de las locaciones, así como del Instituto de Cine (ICAIC), que colaboró y facilitó el trabajo.
El experimentado actor de cine y televisión Adrian Sparks encarnó a Papa, como llamaban a Hemingway sus amigos pescadores del Cojímar, en el este de La Habana, donde el premio Nobel de Literatura 1954, fondeaba su yate El Pilar.
"Para mí como actor, retratar a alguien en su propia casa, con su máquina de escribir es algo muy valioso", dijo Spark a AFP.
La actriz Mariel Hemingway, nieta del escritor, realizó su segundo viaje a Cuba (el anterior 13 años atrás) para ver por primera vez la película. De 54 años, Mariel nació tres meses después de la muerte de su abuelo, en 1961.
Mariel señala que haber saltado las restricciones del embargo para hacer la película sobre su abuelo "es una increíble oportunidad, ser los primeros en venir e ir. Lo que quiero decir es que la historia es importante, pero lo más importante es que el puente (entre los países) haya sido levantado".
Los miembros del equipo están satisfechos también de haber mostrado la cercanía de Hemingway con Cuba, incluso con su última esposa, Mary Welsh (1908-86), interpretada por la actriz inglesa Joely Richardson.
Hemingway pasó 22 años de su vida en Cuba, después de una primera visita en 1928. En la isla escribió El viejo y el mar, Por quién doblan las campanas y París era una fiesta.
Según Yari, la película tendrá otras dos proyecciones en La Habana durante los días del Festival.