El padre camagüeyano Fernando Gálvez se mostró preocupado por la salud y el bienestar de José Daniel Ferrer García y otros activistas de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), en huelga de hambre para protestar contra la represión y asedio a la sede de la organización.
“En nombre de Dios y en nombre de Cuba les ruego: detengan la huelga”, dijo Gálvez a Radio Martí.
“Al mismo tiempo condeno a los que están acosando, están impidiendo a que lleguen las personas a la casa donde ellos realizan esa labor humanitaria de dar alimentos y medicamentos", declaró el sacerdote, párroco de la Iglesia Católica de San José de Lugareño.
Ferrer inició el 20 de marzo una huelga de hambre para protestar contra la política del régimen de impedir a personas llegar a la sede de la UNPACU en el Reparto Altamira, en Santiago de Cuba.
Si algo le llega a ocurrir a los huelguistas, dijo Gálvez, las autoridades de Cuba serán los responsables. "Se hacen responsables de cualquier desenlace fatal en la vida de José Daniel y de sus compañeros".
"Invoco la misericordia del Señor sobre Cuba y sus ciudadanos, que aspiran y luchan por ver respetados sus más legítimos derechos", dijo Gálvez.