Las infecciones por COVID-19 están aumentado en toda Sudamérica, alertó este miércoles la Organización Panamericana de la Salud y advirtió que las infecciones en Colombia pronto alcanzarán los niveles de enero, y que se están agotando las camas en las Unidades de Cuidados Intensivos en las principales ciudades metropolitanas como Bogotá y Medellín.
Durante la sesión informativa semanal que evalúa la evolución del virus en el continente americano, la directora de la Organización, Carissa Etienne, alertó que otros países de la subregión como Perú, Bolivia, Argentina y Uruguay también informan de un aumento de las infecciones.
Ante estos máximos y la creciente preocupación por la aparición de una supuesta “variante andina”, conocida científicamente como C.37, el gerente de incidente para COVID-19 de la Organización indicó que esta calificación no es precisa y no se ajusta a la realidad.
“En lo que corresponde a la variante C.37, esa variante se deriva de otra que ya circulaba a nivel mundial, llamada B 1.1.1. De hecho, esa variante al parecer ya estaba circulando al parecer desde diciembre en Perú y en los siguientes meses se ha detectado también en Chile, y al menos un caso en Argentina, Brasil y Ecuador. Sin embargo, no es preciso llamarla andina ya que no está claro su origen y también se ha detectado en Estados Unidos, Australia, Alemania, España y en el reino Unido”, especificó.
Añadió que la variante comparte “características comunes a otras de interés”, pero que “no hay evidencias que permitan afirmar una mayor transmisibilidad y mucho menos mayor letalidad”. Afirmó que, aunque está distribuida por diversas zonas de Perú, la variante circula juntamente con otras variantes presentes en la región y que en estos momentos “no es dominante por lo que es temprano para asociarla con esas nuevas olas epidémicas”.
Etienne también explicó que casi todos los países de América Central informan de un aumento de las infecciones y que las hospitalizaciones están en su punto más alto en Costa Rica, ya que el país centroamericano informó de un alza del 50% de los casos durante la última semana. Señaló que los hospitales de Guatemala también han alcanzado su capacidad máxima.
Ante esta situación, afirmó que no “es de extrañar” que muchos países de la región hayan endurecido las medidas de salud pública ampliando los toques de queda, limitando las reaperturas e imponiendo nuevas órdenes de permanencia en casa.
“Estas decisiones nunca son fáciles, pero teniendo en cuenta el aumento de las infecciones, es exactamente lo que hay que hacer. Sabemos que estas medidas funcionan y felicito a los dirigentes de nuestra región por dar prioridad a la salud”, indicó.
Asimismo, destacó que las tasas de infección de Canadá han superado las cifras de Estados Unidos por primera vez en la pandemia y que los casos también están aumentando en todo el Caribe.
“Durante la semana pasada, más de 1,4 millones de personas se infectaron con el COVID en nuestra región y más de 36.000 murieron por complicaciones relacionadas con el Coronavirus. De hecho, una de cada cuatro muertes por COVID registradas en el mundo la semana pasada tuvo lugar aquí mismo, en las Américas”, destacó.
Semana de la vacunación en las Américas: hay que vacunar a los niños
La máxima responsable de la Organización aprovechó el encuentro para recordar que dese el pasado sábado se celebra la Semana de la Vacunación en las Américas, por lo que destacó la importancia de mantener las inmunizaciones rutinarias.
“El año pasado, se vacunó a casi 500.000 niños menos en las Américas contra enfermedades como la difteria, el tétanos y la tosferina. Y más de 300.000 no se vacunaron contra el sarampión. Estas tendencias no son nuevas: desde hace algunos años, hemos visto disminuir la cobertura de inmunización en nuestra región”, alertó.
Aunque las medidas de cierre han supuesto un reto y algunos padres siguen teniendo miedo de llevar a sus hijos al médico, destacó la buena preparación de los sistemas sanitarios de la región para administrar la inmunización rutinaria de forma segura, y que en la mayoría de los lugares se administran de forma separada de los cuidados relacionados con laCOVID-19
“Por tanto, los niños no deben saltarse las vacunas”, advirtió.
A lo largo de esta semana los trabajadores sanitarios vacunarán a casi 100 millones de personas contra enfermedades prevenibles como el sarampión, la gripe y el virus del papiloma humano, y administrarán casi 9 millones de dosis de vacunas contra el COVID-19 en 31 países y territorios de las Américas.
La vacuna de Cuba sigue en fase de ensayo clínico
Ante la pregunta sobre si la vacuna Soberana II está cerca de producirse, el doctor Jarbas Barbosa explicó que, según sus informaciones, sigue todavía en la tercera fase de ensayos clínicos y que posteriormente se habrá de proporcionar información y estar autorizada por una autoridad sanitaria nacional antes de llegar al público.
“Estas son decisiones soberanas de cada país. Los países no necesitan el apoyo de la OPS o la OMS para hacerlo. Ellos toman sus propias decisiones en base a las dosis que les proporciona cada productor para autorizar la vacuna que se utilizará en el país”, afirmó el subdirector de la OPS ante el objetivo apuntado por el gobierno caribeño de empezar la vacunación este verano.
La donación de vacunas de España a la región es una muestra de solidaridad
Con relación al llamado previo de Etienne a los países ricos para que donen vacunas, la directora de la Organización aplaudió el reciente anuncio del presidente de España, Pedro Sánchez, por el que donará a América Latina ente el 5 y el 10% de las vacunas que compre en 2021 calificándolo de “muestra de solidaridad” y una contribución al bienestar de toda la región”.
“En este acuerdo España indicó que esta donación se canalizará a través del mecanismo COVAX y priorizando América Latina y el Caribe. Es probable que la OPS, a través del Fondo Rotatorio, supervise la distribución a nuestros países, pero hasta ahora no se han identificado países específicos”, explicó.
Añadió que sigue en contacto con las autoridades españolas acerca de los plazos y las cantidades que se donarán y que una vez que se aclare ese panorama, la Organización “propondrá una estrategia centrada en la equidad, con especial consideración a los países que hasta ahora han tenido un acceso limitado a las vacunas”.
La máxima responsable de la Organización también encomió el anuncio del Gobierno de Estados Unidos de compartir hasta 60 millones de dosis de la vacuna de Astra-Zeneca.