La salud de la presa política Xiomara de las Mercedes Cruz Miranda ha empeorado en las últimas horas, informó este sábado a Radio Televisión Martí, Berta Soler Fernández, vocera del movimiento opositor Damas de Blanco.
Soler dijo este sábado que por una comunicación con la hija de la disidente, supo que a esta la están señalando con "un posible diagnóstico de cáncer", pero no es hasta el lunes a las 12: 00 pm que revelarán todos los detalles.
Cruz Miranda fue urgentemente trasladada desde una prisión en Ciego de Ávila, la pasada semana, al hospital Salvador Allende, antigua Quinta Covadonga, en el Cerro, La Habana.
"La hija [Clara de las Mercedes Iznaga] dijo que le iban a canalizar la vena por que tiene el potasio bajo, también le dijeron que tenía un posible diagnóstico de cáncer en un pulmón, y cuando ya iba saliendo [este sábado] le dijeron que aparte de la hemoglobina baja, por lo que la van a transfundir, tenía también un problema de estafilococo en sangre", indicó Soler.
Clara de las Mercedes, hija de la presa política, la visitó el jueves en el hospital y ofreció los primeros detalles de la gravedad de la madre a Radio Televisión Martí.
Según dijo inicialmente los médicos le habían diagnosticado "líquido en un pulmón, y tiene mucha falta de aire", la hemoglobina "le bajó a seis" y presenta una inflamación en el hígado, detalló.
"No tiene fuerzas ni para caminar", añadió con visible preocupación.
Soler, que ha seguido como líder de las Damas de Blanco el caso de Cruz Miranda, fue enfática con la preocupación por la salud de la opositora.
"No es posible que en dos meses que llevaba ingresada en un hospital de Ciego de Ávila, no hayan dado con un diagnóstico real, final... o ya el diagnóstico lo saben y lo están ocultando", señaló.
"A ella la llevaron buena y sana para la prisión, y ahora mismo su salud corre peligro, su vida corre peligro y los responsables son ellos, el Departamento de Seguridad del Estado y el gobierno cubano", acusó Soler Fernández.
Cruz Miranda fue sancionada en 2018 a un año y cuatro meses de cárcel, por el delito de "amenaza", uno de los delitos de los que usualmente las autoridades cubanas acusan a los opositores pacíficos.
Como castigo adicional, la activista fue obligada a cumplir la sanción en la provincia Ciego de Ávila, a más de 400 kilómetros de su lugar de residencia.
Allí estuvo ingresada dos meses, sin que se conociera la causa de sus múltiples padecimientos de salud, surgidos tras su encarcelación.
[Con reportes en audio de Luis F. Rojas e Ivette Pacheco]