María Acón e Ismael Boris Reñí, los dos activistas de UNPACU que junto a Zaqueo Báez fueron arrestados tras acercarse al papa Francisco en la Plaza de actos del régimen, hablaron a Radio Martí, después de ser liberados en la tarde de este lunes, sobre las circunstancias en las que acometieron la acción cívica.
Acón declaró que este encierro le demostró que "puede vivir dentro de la cárcel y que no teme enfrentar al aparato represivo de la dictadura cubana", que agradece al exilio por la campaña a favor de ellos y a Dios por "permitirle decir al Papa la verdadera realidad de Cuba bajo el régimen de los Castro".
El activista Boris Reñí dijo a Radio Martí que se acercó al Papa con las manos en alto en señal de paz, de que venía desarmado; que su santidad le bendijo mientras le miraba directamente; y él, entonces, le dijo que Cuba vive bajo una despiadada dictadura que golpeaba cada domingo a las Damas de Blanco.
Aunque hubo numerosas detenciones temporales de opositores en torno a la visita del pontífice, el incidente más conocido fue protagonizado por Zaqueo Báez Guerrero, Ismael Boris Reñí y María Acón, activistas de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) que se aproximaron al Papa para pedirle por los Derechos Humanos en la isla y permanecieron detenidos desde el 20 de septiembre.
Este lunes, los activistas filmaron varios videos contando el testimonio de los hechos que condujeron a su detención y sobre el tiempo que estuvieron encarcelados.