La jefa de relaciones exteriores de la Unión Europea, Federica Mogherini, dijo el lunes en La Habana que Cuba “está en una encrucijada luego de haber completado su transición generacional y haberse dotado de una nueva Constitución”, y llamó al gobierno de Miguel Díaz Canel a resolver lo que él mismo denominó "bloqueo interno".
Europa está “firmemente comprometida” con el desarrollo de Cuba, aseguró la alta representante de la UE, y recordó que desde 2008 la UE ha comprometido unos 200 millones de euros en proyectos de cooperación con la isla.
“Abrir la economía cubana y lo que el Presidente [Miguel Díaz Canel] ha denominado el bloqueo interno es de crucial importancia”, dijo Mogherini. “Ahora Cuba se enfrenta a importantes retos para llevar a cabo su modernización económica en un entorno muy difícil”.
Simultáneamente, en Madrid, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH), que integran ex prisioneros políticos cubanos, llamó a la Unión Europea a suspender su acuerdo con La Habana “debido al agravamiento de la situación represiva” en la isla.
Mogherini y el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, encabezaron el segundo encuentro bilateral para actualizar lo que él calificó de “dinámicas” relaciones entre ambas partes, reanimadas en 2016 tras el Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación (ADPC), en vigor provisionalmente desde noviembre de 2017.
En la nueva "encrucijada" que atraviesa Cuba, la Unión Europea quiere ver la posibilidad de aprovechar aún más “el potencial de nuestra cooperación económica, incluido el comercio y la inversión”, declaró Mogherini.
La agenda del encuentro incluia discusiones sobre la aplicación de la Ley Helms-Burton.
Para la jefa de la diplomacia europea, se reúnen en un “momento importante en la asociación con América Latina y el Caribe”, en el cual “Cuba es un socio clave tanto en el contexto bilateral como en el regional”, porque “puede servir de puente” entre las naciones latinoamericanas y caribeñas de un lado y Europa del otro.
“Estamos interesados en fortalecer el seguimiento de nuestros diálogos políticos y, al mismo tiempo, lanzar nuevos diálogos sobre agricultura, energía, cambio climático y medio ambiente”, precisó Mogherini.
De acuerdo con Rodríguez Parrilla, con esta reunión cierra un ciclo en el que la isla y el bloque comunitario han “trabajado de manera sistemática y rápida”, y en el cual hubo avances en sectores como la energía, la agricultura, el enfrentamiento al cambio climático, el intercambio para la modernización de la economía cubana y la cultura.
El Acuerdo de Diálogo Político y de Cooperación de 2016 puso fin a dos décadas de la llamada “posición común” europea, que vinculaba todo avance en las relaciones bilaterales a los progresos en democratización y derechos humanos en la isla.
Con información de EFE y Associated Press
