El canciller de Venezuela, Rafael Ramírez, cerró hoy su gira exterior destinada a frenar la caída libre de los precios del petróleo firmando un acuerdo de venta de crudo y derivados al gigante ruso Rosneft.
Rosneft, la mayor petrolera rusa, suscribió un contrato con la venezolana PDVSA para la compra de 1,6 millones de toneladas de petróleo y 9 millones de toneladas de derivados de crudo venezolano en un plazo de cinco años.
"Quiero destacar el creciente volumen de cooperación en la esfera petrolera entre Rusia y Venezuela", afirmó el presidente de la mayor petrolera rusa, Ígor Sechin, quien agradeció el apoyo de Ramírez y del nuevo presidente de PDVSA, Eulogio Del Pino.
Este es el segundo contrato de compra rusa de crudo venezolano entre ambos consorcios, ya que en mayo pasado acordaron otro de 1,6
millones de toneladas de crudo y 7,5 millones de toneladas de derivados por el mismo plazo de tiempo.
En virtud de ese primer contrato, por el que la parte rusa debía pagar por adelantado $2.000 millones, Rosneft ya ha recibido 375.000 toneladas de derivados.
Rosneft y PDVSA participan en cinco proyectos conjuntos para la extracción de crudo en Venezuela, cuyas reservas se estiman en unos 20.500 millones de toneladas de petróleo.
Precisamente, ambos consorcios firmaron un acuerdo de cooperación
para la realización de proyectos conjuntos en la plataforma continental del país latinoamericano durante la visita del presidente venezolano, Nicolás Maduro, a Rusia en julio de 2013.
Ramírez y Sechin, estrecho aliado del presidente ruso, Vladímir Putin, acordaron hoy la celebración el próximo 21 de noviembre en Caracas de una conferencia internacional sobre el desarrollo del mercado internacional de petróleo.
Rusia es el segundo mayor exportador de crudo, por lo que también está muy interesada en revertir la caída del precio, que ha provocado una depreciación de más del 30 por ciento de la moneda nacional, el rublo.
"Para Venezuela, el precio deseable serían los $100 por barril", dijo Ramírez durante su visita el sábado a Irán, según informaron hoy medios iraníes.
Esta semana el precio del barril de Brent cayó por debajo de los $80 lo que levantó todas las alarmas, ya que era de $115 en junio. "Barajamos todos los escenarios posibles, incluido una catastrófica caída de los precios, lo que es totalmente posible", advirtió esta semana el presidente ruso, Vladímir Putin.
El ministro iraní también llamó a "aunar esfuerzos" para revertir la actual tendencia, aunque reconoció que retornar a los precios de junio, $115 por barril, "será extremadamente difícil".
Según informó el viernes la Agencia Internacional de la Energía, el actual bajón de precios del crudo puede prolongarse en la primera mitad de 2015.