"La noche los abriga en cualquier portal de una tienda del boulevard de San Rafael. Mordidos por el hambre, intentan calmar sus tripas buceando los tanques de basura desde Galiano hasta Prado"
El movimiento underground del hip hop incomoda los oídos del poder. Siempre ha sido un movimiento que genera sospecha política. Ellos son la nueva canción protesta, herederos de los códigos de la poesía urbana.
A Mi Cayito,"un segmento de litoral entre El Mégano y Guanabo, van muchos turistas gays o bisexuales sabiendo qué van a encontrar. La imagen erótica del negro ayuda a vender mucho".