El pastor apostólico Alaín Toledano fue acusado este miércoles del presunto delito de "desobediencia" por haber realizado un evento femenino en su congregación pese a la prohibición de las autoridades.
Toledano fue citado a la unidad de la Policía Nacional Revolucionaria de Micro 3, en el reparto El Salado de Santiago de Cuba, donde le entregaron un documento con la acusación firmada por el jefe de la unidad, el primer teniente Daniel González Clavel, dijo Toledano a Radio Televisión Martí.
"Ellos me han presionado con todo, expropiaciones, desalojo, decomiso. Creo que soy el único pastor en Cuba al que le han quitado la casa dos veces, que le han demolidos dos veces. Lo que les queda es tratar de encerrarme y desaparecer la iglesia".
La "desobediencia" ocurrió, según la policía, entre el 8 y 10 de agosto por haber celebrado en su iglesia la conferencia Déboras 2019 sobre el papel de la mujer en la sociedad, auspiciada por el movimiento Mover Apostólico, a pesar de que las autoridades le habían prohibido su realización, explicó Toledano.
"La furia, y el odio y el deseo de venganza los llevó a ellos a retomar como justificación para atacarme una vez más el pendiente que tenían de la amenaza que me habían hecho cuando celebramos el evento de mujeres", dijo el pastor.
Ahora el líder del movimiento Mover Apostólico intentará contratar los servicios de un abogado, algo que no ha sido posible en otras oportunidades.
El delito de desobediencia conlleva una pena de privación de libertad de tres meses a un año o multas de 100 a 200 cuotas, o ambas.