El operativo policial que puso fin a la exitosa empresa de un quesero cubano en Artemisa ha dejado en evidencia los absurdos mecanismos de la economía socialista y ha generado numerosas críticas de la población.
Como viene haciendo la televisión nacional en los últimos meses con reportajes de redadas contra la corrupción, los acaparadores y coleros, este fin de semana presentó la detención del ganadero de la finca Santa Ana en Caimito, por un presunto delito de actividad económica ilícita.
El reporte transmitido en el Noticiero Nacional, acusa al campesino de aportar solo 70 litros de leche de los 150 que debía producir a partir de sus 42 vacas, de tener equipos industriales para fabricar tres variedades de queso con los que surtía a tres restaurantes de comida italiana en La Habana.
En Cuba los ganaderos no pueden vender leche ni sus productos derivados, tampoco pueden comercializar la carne de las vacas y el sacrificio de ganado vacuno es uno de los delitos más severamente castigados en el código penal cubano.
El portal digital 14ymedio ha compilado una serie de comentarios de la ciudadanía, molesta por estas redadas que han puesto fin a numerosos negocios privados en el que los cubanos han sorteando todo tipo de trabas para convertirse en prósperos y han logrado abastecer con sus productos a la población.
"Ni que le dieran tanta leche al pueblo. Qué desvergonzados son, y por qué no proceden a realizar detenciones a los directores de empresas y dirigentes del país que roban", dijo Reinier Rivera.
"Por eso es que no hay nada; por qué nadie quiere producir, porque después que estas personas invierten y desarrollan en un negocio llegan ustedes intervienen y le quitan todo", comentó Alejandro Reyes.
"Yo a ese hombre le doy la planta de queso más grande que tenga Cuba abandonada sin producir, y voy a crear empleos y no faltará el queso. Esta gente solo le troncha el desarrollo al cubano", dijo Lachi Maye Aguilar
"Si ese hombre tuviera a su alcance legalizar su negocio, sería el mayor productor de queso de Cuba, pero no, ¡lo de ustedes es cerrar todo y limitar al pueblo!", declaró Manuel Mons.
"A ver, ¿de quién es la vaca? ¿Quién le da de comer? Son unos cara de piedras estos inútiles. Ahora les quitan las vacas y le cierran el negocio del queso en lugar de estimular que produzcan queso, además de producir la leche. Ustedes tienen que parar ya", comentó Juan Armand Cureaux.
El escritor cubano Jorge Olivera Castillo en un análisis publicado en Cubanet alertó sobre la gravedad de la situación económica en Cuba y señaló que la arremetida contra los coleros y revendedores, exaltada en los medios de prensa oficialistas como el principio de la solución a la crisis, es un simple show que no garantiza una mejoría a "las paupérrimas condiciones de vida que enfrentan la mayoría de las familias en Cuba" y que las redadas en el mercado negro en los últimos tres meses son una "cifra ridícula frente a la masificación del robo y la especulación, en gran parte de las empresas y centros fabriles del estado".
