China establecerá una Zona de Identificación de Defensa Aérea (ADIZ, en inglés) en el mar de China Meridional que cubrirá el archipiélago Paracel y las islas Pratas y Spratly, territorios disputados con otros países de la región, informó hoy la prensa local.
Según el periódico South China Morning Post, que cita fuentes del Ejército Popular de Liberación (EPL) chino, el plan comenzó a prepararse en 2010, mismo año en que el país asiático urdió otro ADIZ para el mar de China Oriental, que se estableció en 2013.
La nueva ADIZ podría añadir más leña al fuego a las tensiones que el país mantiene con Estados Unidos y con sus vecinos del sudeste asiático a cuenta de las islas en disputa, afirmaron al diario varios expertos.
"Imágenes de satélite recientes muestran que el EPL ha desplegado aviones de reconocimiento y alerta temprana KJ-500 y aviones de patrulla marítima KQ-200 en el arrecife de Fiery Cross -zona controlada por China pero reclamada por Filipinas, Vietnam y Taiwán-", asegura el experto taiwanés Lu Li-Shih.
También advierte de que China está construyendo instalaciones equipadas con aire condicionado en el arrecife para que aviones de combate, que deben protegerse de las altas temperaturas, la humedad y la salinidad, despeguen desde allí.
Una vez que se completen estas instalaciones, los aviones de combate del EPL podrían unirse a los de reconocimiento para llevar a cabo operaciones propias de una ADIZ, añade.
Otro experto citado por el diario recuerda que Pekín dio a conocer su ADIZ en el mar de China Oriental incluso antes de ser capaz de detectar, rastrear o expulsar a aviones de otros países, y asegura que el país anunciará la nueva ADIZ muy pronto.
"Pekín ha dudado en establecer una ADIZ en el mar de China Meridional por consideraciones técnicas, políticas y diplomáticas. El principal problema era que en el pasado los aviones del Ejército chino no tenían capacidad para expulsar aviones extranjeros", asegura otro analista.
El mes pasado, aviones militares estadounidenses realizaron al menos nueve operaciones de patrulla en el mar de China Meridional, asevera el periódico, mientras que en abril China aprovechó para continuar su expansión militar con la creación de dos nuevos distritos en territorios disputados, irritando a sus vecinos en la región, particularmente a Filipinas y Vietnam.
China creó dos nuevos distritos dentro de la ciudad de Sansha, en la sureña provincia de Hainan, que cubren territorios de las disputadas islas Spratly, el atolón de Scarborough y el archipiélago Paracel.
Filipinas, Vietnam, Malasia, Taiwan y Brunei reclaman partes de este estratégico mar -por el que circula el 30% del comercio global y que alberga el 12% de los caladeros mundiales, además de yacimientos de petróleo y gas- aunque China se atribuye la soberanía de esas aguas en su totalidad.
Según el Tribunal de Arbitraje de La Haya en 2016, Filipinas ostenta la titularidad de parte de las Spratly y del atolón de Scarborough, lo que lo convierte en el único país que cuenta con un fallo internacional que avala su postura en el asunto, aunque Pekín no lo reconoce.