A 17 años de una de las olas represivas más intensas del régimen cubano contra opositores pacíficos, conocida como “la Primavera Negra de 2003”, algunas de las víctimas que aún permanecen en Cuba, afirman que la represión perdura contra toda la sociedad.
Los registros domiciliarios y arrestos practicados entre el 18 y el 21 de marzo de 2003 terminaron en procesos judiciales contra 75 periodistas y activistas de la sociedad civil a quienes el régimen impuso condenas de entre 6 y 28 años de cárcel.
"Aquí no se avanza, con la historia esta de somos continuidad, es lo mismo y más de lo mismo. Si hacen cualquier cambio, sea un pasito hacia adelante, después dan cuatro para atrás", indicó a Radio Televisión Martí, Martha Beatriz Roque, la única mujer del grupo de los 75.
La economista condenada a 20 años de cárcel insistió en que Cuba es un país estancado en la historia de 1959.
"Lo que hacen cada vez que pueden es incrementar la represión", dijo Roque.
La mayoría de los que fueron a prisión eran activistas que promovían el plebiscito que planteaba el Proyecto Varela, periodistas independientes y otros activos opositores, como es el caso del médico Oscar Elías Biscet, quien después de cumplir una condena de 3 años, fue liberado y detenido de inmediato meses antes de los arrestos de marzo.
Después el régimen lo incluyó en el grupo de los 75. Según el creador del Proyecto Emilia, la única diferencia de ahora y el 2003 es la forma en que se reprime.
"Ya ellos tienen una serie de decretos de leyes que les permiten poner en prisión a las personas por poco tiempo. Creo que van a actuar más así, para evitar el escándalo del 2003, que fue un fracaso político total, cuando el mundo entero protestó", dijo Biscet.
La prensa independiente fue fuertemente golpeada. El periodista Jorge Olivera, quien fue condenado a 20 años, nos dijo desde La Habana, que paradójicamente, ahora la represión es mucho más generalizada en el país.
"Considero que ahora hay un recrudecimiento. El entorno está más caótico en todo el sentido porque tenemos una situación económica que no se avizoraba desde hace algunos algunos años", comentó el escritor.
En estos momentos la situación es crítica, opina Olivera Castillo, porque "se combinan una serie de cosas que hacen un cóctel explosivo y esto puede realmente llegar al caos total, a la imposición de estado de sitio, o toque de queda porque la situación con el petróleo de Venezuela, en fin.. una serie de factores que conduciría a una gran y definitiva catástrofe".
Del grupo de los 75, 9 han fallecido, y 9 continúan en Cuba, pero de estos 9 hay uno que el régimen regresó a prisión, Jose Daniel Ferrer García.
"Lo que implica haberse quedado en el país es un riesgo porque todos sabemos que las causas que están abriendo contra José Daniel Ferrer y el juicio son solamente un show para tratar de convencer a la gente en el exterior de que él es un delincuente", alertó Roque Cabello.
Los disidentes fueron liberados en su totalidad con la ayuda de la iglesia católica cubana y la mediación del gobierno español.