Recortes en la entrega de combustible para el transporte y el ahorro forzoso de energía que incluye apagones, tanto en el área residencial como estatal, figuran entre las medidas más urgentes del Gobierno cubano para paliar las dificultades económicas de la isla a partir de este verano.
Los recortes llegan con más fuerza luego del primer semestre de 2016, marcado por un complejo escenario económico que ha puesto al país en serios problemas de liquidez y provocan alarma en la población, que siente estar a las puertas de un segundo período especial.
"La gente está muy disgustada por la reducción de combustible en los ómnibus que hacían el trayecto desde la Habana a las playas del Este y que antes pasaban cada 15 minutos, dijo a Martí Noticias María Elena Mir, residente en la playa de Guanabo.
La reducción del combustible al 50% afecta considerablemente a todos, desde el que trabaja lejos de casa hasta el que quiere llegarse a las playas del Este a refrescar en un verano caluroso y con muy pocas opciones recreativas.
“Colas, matazones y la gente esperando molesta y hablando de la llegada de otro período especial es lo que encuentra uno a cada paso”, aseguró Mir.
En respuesta al malestar de la población, el Gobierno ha explicado que el plan de reducción de combustible se hace para evitar los apagones “y encima le piden a la gente que ahorre energía eléctrica, pero es imposible no usar el ventilador a toda hora con tanto calor”.
Ramón Zamora, graduado de medicina que no ejerce actualmente, dijo que en la provincia de Holguín hay recortes de hasta el 60% y todavía los apagones ocurren por breve tiempo, pero “la gente está esperando lo peor y expresan su disgusto en todas partes”.
Un verano caliente y con pocas opciones
El verano se ofrece con pocas alegrías y diversiones para la población, señaló Zamora, padre de dos niños que, como tantos vecinos, no tiene opciones para la recreación de los menores.
“Una casa en las playas "Pesquero y Playa Blanca", al norte de Holguín, cuesta 80 pesos la noche, pero es imposible “darse el lujo” de ir porque es difícil conseguir una reservación (gran demanda de la población) y apenas tenemos transporte para ir hasta allí", precisó Zamora.
Keyber Rodríguez, residente en Baracoa, asegura que los fogones de leña volverán como la opción para poder cocinar ante tantos apagones. "Aquí casi todos cocinan con electricidad, y si empiezan los apagones no queda otra opción".
El recorte en el consumo de combustibles también afectará a la red de tiendas del Ministerio de Comercio Interior, especialmente al sistema de transporte que asegura el abasto de productos en las tiendas recaudadoras de divisas.
Un funcionario de la corporación CIMEX informó a Cubanet que solo se priorizará la distribución de alimentos y productos básicos más demandados por la población como aceite, arroz, cárnicos, jabones y detergentes, debido a que la empresa reducirá el plan de transportación desde los almacenes a menos del 50 por ciento.
El sitio digital destacó este jueves que las recientes medidas económicas también llegaron a los medios de prensa oficialistas, que tendrán que limitar la cobertura de eventos noticiosos, y acudir a los mismos por sus propios medios, pues no hay combustible para transportarlos.
En las oficinas de prensa de la isla ya se limita el uso de televisores para ocasiones especiales, como serían las Olimpiadas de Río 2016. Lo mismo ocurre con los aires acondicionados, cuyo funcionamiento tiene horarios controlados.
¿Un segundo período especial? ¿De quién es la culpa?
El ministro de Economía, Marino Murillo, explicó este miércoles ante los diputados de la Asamblea nacional que el estado de las finanzas es tenso.
Dijo que el país tiene problemas de liquidez debido a la caída en el precio del níquel, el incumplimiento en los pronósticos de producción de azúcar y otros ingresos no especificados. Informó que la zafra 2015-2016 produjo un 19% menos de azúcar crudo que la 2014-2015. Según el ex ministro de economía José Luis Rodríguez. en la anterior se produjeron, 1,9 millones de toneladas, lo que sitúa el resultado de la última en poco más de 1,5 millones de toneladas.
Las palabras del funcionario, lejos de calmar a la población, lo que hizo fue avivar el fantasma de un segundo período especial.
Navit Fernández, exauditor del Ministerio de Inversiones Extranjeras y residente en el municipio 10 de octubre, en La Habana, señaló que en la capital están ocurriendo apagones muy seguidos.
Fernández considera que la gente en Cuba ahora es “diferente” a la década del 90, cuando ocurrió el primer período especial, y destaca que "en esa época había conciencia política, y la gente creía en el socialismo, pero hoy no cree, y muchas personas están por un cambio dentro del país".
"Solución a corto plazo no hay porque para eso hay que tener liquidez y el gobierno ha reconocido que no la tiene”, concluyó el economista.
La periodista independiente, Miriam Leyva, especializada en temas económicos, señaló que el Gobierno cubano no fue capaz de tomar medidas, aún cuando sabía que la situación de Venezuela y la caída del precio del petroleo tendrían consecuencias en la isla.
A juicio de la periodista, ya no pueden echarle la culpa al imperialismo yanqui", concluyó Leyva.
