El Gobierno cubano anunció nuevas normas para la comercialización e importación de vehículos al país, que incluyen cambios en las tarifas arancelarias.
Los cubanos podrán importar carros al mismo precio que lo hacen las empresas, a una tarifa menor pero solo en divisas, dijo el ministro de Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila, en un comunicado.
"Se mantiene la importación y comercialización de vehículos en divisas convertibles y ajustando los precios de venta de modo que no variaran si el comprador es una persona jurídica o natural", precisó el funcionario.
Para las personas naturales, "los precios serán inferiores a los actuales. Los aranceles, servicios de aduana e impuestos, serán en divisas convertibles", puntualizó.
La medida entraría en vigor a más tardar en noviembre, según el comunicado.
En los últimos meses las autoridades han modificado normas en varios sectores de la economía para captar dólares ante la falta de liquidez y la inflación.
Otra de los cambios recientes es que las agencias de turismo venderán en moneda nacional los vehículos que terminen el ciclo de explotación previsto. Anteriormente estos solo se vendían como partes de repuesto.
Las agencias tendrán listas de espera con los interesados, dijo el ministro.
Importación de vehículos a Cuba
Los cubanos podrán importar ciclomotores y motocicletas de motores de combustión interna o híbridas de baja cilindrada, con o sin sidecar, tanto por la vía de pasajeros como por envíos. Además, permitirán la importación directa de triciclos eléctricos con capacidad superior a dos plazas o con capacidad de carga.
Las personas que cumplen misiones oficiales en el exterior, como los médicos, podrán importar vehículos, pero solo una vez y bajo normas específicas que imponga el ministerio al que pertenecen y que no han sido anunciadas.
Cuba autorizará también la transmisión de los títulos de propiedad entre personas naturales y jurídicas aunque las empresas estatales necesitarán un permiso especial del Consejo de Ministro para venderle a un privado. El personal diplomático no está incluido en estos cambios porque "tienen un régimen especial", aclaró el funcionario.
El impuesto por la venta de los vehículos será variable. En el caso de los de gama alta se aplica un 35 % del valor total de la venta en divisas convertibles.
"Se ajusta y generaliza el impuesto progresivo en divisas convertibles por la cantidad de vehículos a partir del tercero que se adquiera de las categorías, motocicleta, auto y auto rural", precisó.
La mayoría de estas medidas habían sido esbozadas por el primer ministro Manuel Marrero Cruz en las recientes sesiones del Parlamento. Ahora Rodríguez Dávila anunció otras y aseguró que hay más cambios previstos y que el objetivo es recaudar fondos para "desarrollar el transporte público de pasajeros y las infraestructuras".
El transporte es uno de los sectores más golpeado por la crisis. Cuba logra mover menos de tres millones de viajeros diarios, frente a los 5,9 millones que transportaba hace cinco, según cifras oficiales.
El Estado oferta vehículos de segunda mano pero a precios exorbitantes. En 2020, la estatal CIMEX -perteneciente al conglomerado de los militares GAESA- puso a la venta carros que costaban entre los 34.000 a 90.000 dólares.
Hay también otras empresas como la del cubanoamericano Hugo Cancio, uno de los empresarios más estrechamente vinculados al régimen, que importan vehículos a la isla.
Katapulk tiene hasta una tienda online para la venta de camiones, motocicletas, equipos agrícolas y de la construcción desde el pasado año, tras recibir licencias por parte del Departamento de Comercio de Estados Unidos.
Los precios de los camiones oscilan entre 36.000 dólares y 62.000 dólares y un autobús cuesta alrededor de 72.000 dólares. Los automóviles cuestan entre los 16.800 y los 47.000 dólares.
Foro