Más de 2.000 personas fueron detenidas en las multitudinarias protestas del lunes contra la disputada victoria del presidente Alexander Lukashenko frente a la candidata Svetlana Tikhanouskay.
La prensa cubana destacó el pretendido triunfo de Lukashenko "en las elecciones presidenciales con el 80,23 % de los votos a su favor", quien se aferra al poder con su sexto mandato presidencial.
El diario Granma recordó los estrechos lazos del "último dictador de Europa" con el régimen de La Habana pero nada mencionó acerca de los miles de manifestantes que salieron a las calles para denunciar el amaño electoral en una protesta que según describe la agencia Reuters no se veía desde la caída de la Unión Soviética.
"Durante la visita a Bielorrusia del Presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, en 2019, en el Salón Ceremonial donde transcurrió el recibimiento oficial, Lukashenko recordó sus conversaciones con el General de Ejército Raúl Castro y con Fidel, cuyo liderazgo pone siempre como ejemplo", escribe el órgano del Partido Comunista de Cuba.
Otros países como Rusia, China y Venezuela felicitaron al presidente Lukashenko quien lleva 26 años en el poder.
La rival Tikhanovskaya, una exprofesora de inglés que se presentaba a las elecciones porque su marido, un popular bloguero del país está detenido y ha sido vetado a estos comicios, se vio obligada a huir a Lituania.
“Las autoridades deberían pensar cómo entregarnos pacíficamente el poder. Hasta ahora solo han respondido con violencia contra ciudadanos bielorrusos pacíficos”, declaró.
Los comicios han sido criticados por numerosos países y se realizaron sin la presencia de observadores internacionales.
El secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, reaccionó expresando que el desarrollo de las elecciones presidenciales del 9 de agosto en Bielorrusia es "profundamente preocupante".
"No eran libres ni justos" dijo el secretario de Estado al referirse a los comicios. "Estados Unidos condena enérgicamente la violencia contra los manifestantes y la detención de partidarios de la oposición. Apoyamos las aspiraciones democráticas del pueblo de Bielorrusia" concluyó.
Por su parte, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Borderline, pidió un recuento de los votos e instó al cese de la represión en Bielorrusia, a la par de que Polonia pidió la celebración de una cumbre extraordinaria para abordar la situación en ese país. Alemania por su parte planteó la discusión en la Unión Europea de nuevas sanciones para Bielorrusia.