A un año de restablecer las relaciones diplomáticas, e inaugurar embajadas en ambas capitales, Estados Unidos y Cuba han logrado algunos avances en el proceso de diálogo bilateral, aunque temas claves en la agenda de la llamada "normalización" esperan aún una resolución.
A continuación, un recuento del fruto de las conversaciones y gestiones gubernamentales encaminadas a la normalización de relaciones entre ambos países.
1. Barack Obama se convirtió en marzo pasado en el primer presidente de Estados Unidos en pisar suelo cubano desde la llegada al poder de los hermanos Castro en enero de 1959. En un discurso transmitido en directo por la televisión cubana, Obama alentó a los cubanos a enterrar los últimos vestigios de la Guerra Fría y abogó por el respeto a las libertades en la isla comunista.
2. Los antiguos enemigos ahora negocian en varios frentes: derechos humanos, telecomunicaciones, combate al narcotráfico, protección del medio ambiente y gestión del espacio marítimo común. Sin embargo, los avances concretos son escasos tras más de un centenar de reuniones e intercambios diplomáticos.
3. Entre los progresos más significativos están el restablecimiento del correo postal directo, el retorno de los cruceros estadounidenses a la isla y un acuerdo para reanudar los vuelos regulares entre los dos países, que debe entrar en vigor en septiembre próximo.
4. Diplomáticos, funcionarios del gobierno, inversionistas y celebridades estadounidenses han desfilado por la isla, ávidos de conquistar un mercado que estuvo vedado durante largos años.
5. Pero el comercio bilateral es limitado y el embargo estadounidense, vigente desde 1962, aún representa un obstáculo para la inversión extranjera y los intercambios, indispensables para el éxito de la apertura económica emprendida por el gobernante Raúl Castro.
6. Algunas restricciones en telecomunicaciones, envíos de remesas y agricultura fueron levantadas por iniciativa de la Casa Blanca, pero la eliminación del embargo es facultad del Congreso, cuya mayoría republicana es hostil al acercamiento con La Habana.
7. Empresas como Netflix y Airbnb lograron expandir sus operaciones a la isla. La cadena hotelera Starwood inauguró a finales de julio un hotel en La Habana y planea abrir un segundo. Mientras, una tarjeta MasterCard emitida por el banco floridano Stonegate se convirtió en la primera de EEUU en operar en la isla. Pero expertos legales y analistas políticos señalan la posible violación de la Ley Helms-Burton que supone la autorización de tarjetas de crédito y la licencia para operar hoteles turísticos en Cuba.
8. El 29 de mayo de 2015, Estados Unidos retiró a Cuba de su lista negra de "Países que patrocinan el terrorismo", lo que propició la reconciliación diplomática. Pero además del fin del embargo, Cuba exige la devolución del territorio que ocupa la base naval estadounidense de Guantánamo desde 1903, y la derogación de los beneficios migratorios que alientan la migración ilegal de los cubanos.
9. Por su parte, Estados Unidos exige unos 10.000 millones de dólares en indemnizaciones por las empresas nacionalizadas en Cuba y la isla 300.000 millones por los impactos del embargo y acciones armadas.
10. Aunque los estadounidenses todavía no pueden hacer turismo en Cuba, Obama suavizó las restricciones de viajes con fines educativos, culturales, deportivos y religiosos. Unos 100.000 norteamericanos visitaron Cuba durante los primeros cuatro meses de 2016, duplicando la cifra de los lo hicieron en el mismo periodo de 2015.
(Elaborado con información de Agencias)