Aunque en Cuba casi nadie esperaba una Glasnost, los tímidos reclamos de los últimos años por una prensa más autónoma fueron barridos de un tirón esta semana.
Funcionarios del sector han dicho alto y claro que los medios seguirán en manos del Estado, como ha ocurrido en el último medio siglo.
La decisión divulgada en Granma, fue refrendada por conocidos periodistas oficialistas con cargos en la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC).
“Los medios deben aparecer considerados como propiedad social fundamental (…) nunca deben ser propiedad privada”, dijo Rosa Miriam Elizalde, durante una reunión del sector que analizó los documentos del reciente congreso del Partido Comunista.
Ni independientes ni cooperativos
En el 2013, periodistas cubanos convocados previo a un congreso de la UPEC, fueron invitados a debatir el futuro de los medios mientras el Estado implementaba el plan de moderadas reformas económicas para sacar a flote el sistema.
En el debate, periodistas y medios abogaron por una mayor independencia, formas de gestión cooperativas y hasta se atrevieron a pedir que asumieran el rol como contrapeso del Estado.
“Se precisan de soluciones de fondo para superar los problemas que enfrenta la prensa, que tienen dimensiones económicas, políticas, jurídicas, del discurso, de credibilidad y del propio modelo de prensa", dijo entonces el periódico Juventud Rebelde.
Y agregó: "La prensa (...) debe formar parte de los mecanismos de control popular del país, y convertirse en un valioso contrapeso frente a posibles errores o distorsiones de la política trazada por el Partido y refrendada por la mayoría de nuestro pueblo".
Otra vez se atrincheran
En la reunión el martes, si bien los funcionarios admitieron que la información es "un derecho ciudadano", también retomaron antiguas consignas referidas a que los medios son "una fortaleza en la defensa del socialismo".
"(La prensa) debe ser irrenunciablemente de propiedad social", recalcó Granma.
El diario anunció incluso el nuevo programa de televisión, "Pensar en red", que tendrá un canal en YouTube. El primer programa evocará "los aportes" de Hugo Chávez y Fidel Castro.
¿Y los jóvenes?
La prensa en Cuba tiene un rol ideológico bien definido desde poco después de 1959. Los medios fueron muy pronto nacionalizados y puestos bajo el estricto control del gobierno.
Pero en los últimos años han llovido las críticas dentro de la isla. Muchos en Cuba admiten que jamás leen los pocos diarios que circulan porque no creen en ellos.
A la vez, muchos periodistas se quejan de los bajos salarios y de las dificultades para acceder a las fuentes y hacer su trabajo.
Los más jóvenes suelen usar sus blogs personales para decir lo que se les está negado en los medios oficialistas.
"Es muy difícil que el público confíe en su prensa cuando la mayor parte de sus espacios informativos se concentran en demostrar que viven en una sociedad casi perfecta", dijo el joven periodista Oscar Figueredo Reinaldo en su blog http://sentirjoven.wordpress.com titulado "Prensa en Cuba, ¿la llaga que más nos duele?".
Y recientemente señaló: "Que en Cuba hay burocracia, que hay baches en la calle o que los campesinos y toda su cadena se enriquecen en detrimento del salario del trabajador eso todo el mundo lo sabe".
