Los abogados de Vahe Cy Tokmakjian, un empresario canadiense de 74 años condenado a fines de septiembre en Cuba a 15 años de prisión por presuntos delitos económicos, decidieron apelar la sentencia al fracasar aparentemente gestiones para que la pena fuera extinguida en Canadá.
Pese a sus "serias preocupaciones" respecto a que el resultado del juicio fue predeterminado, los representantes legales en Cuba del encarcelado presidente de Grupo Tokmakjian habrían presentado la apelación ayer jueves, ante el Tribunal Supremo Popular de Cuba.
Tenían de plazo hasta este viernes para hacerlo, pero habían estado considerando renunciar a ese recurso con la esperanza que el gobierno cubano dejara a Tokmakjian cumplir su condena en Canadá.
Uno de los abogados de la compañía, Hermenegildo Altozano, dijo en una entrevista que colegas suyos estaban buscando en la isla una seguridad por parte de las autoridades cubanas de que, si ellos no emprendían nuevas acciones en los tribunales, el empresario sería repatriado para cumplir la condena en su país.
Altozano precisó que funcionarios canadienses han estado activos en el caso y que según le han comunicado a la familia, el ministro de Asuntos Exteriores de Canadá, John Baird, presentó hace dos semanas el asunto a su homólogo cubano, Bruno Rodríguez, en el marco de la Asamblea General de la ONU en Nueva York.
Asimismo, el abogado asegura que el parlamentario Peter Kent, que representa al distrito de Vaughan, Ontario, donde están radicados el hombre de negocios y su empresa , viajó a Cuba para cabildear en favor de la repatriación.
Después de conocerse la sentencia, Kent advirtió en su cuenta de Twitter a quienes estén pensando invertir en Cuba que deben tener cuidado, pues Tokmakjian fue considerado un socio honorable por Fidel Castro, mientras que su hermano supervisa ahora la injusticia.
Tokmakjian, un exportador de automotores y equipos pesados, comenzó a hacer negocios con Cuba hace más de 20 años, y estaba facturando unos $80 millones anuales con sus operaciones en la isla. En marzo de 2011, fue detenido bajo cargos de corrupción y sus oficinas en La Habana fueron allanadas.
El gobierno cubano ha confiscado los activos de la empresa y ha declarado que los daños que el canadiense causó a la economía cubana ascienden a $91,7 millones.
"Cy Tokmakjian fue injustamente detenido y ya ha sufrido bastante", dijo el jueves en un comunicado Lorne Waldman, un abogado canadiense especializado en Derechos Humanos que está ayudando a la familia.
"Cuba debe permitirle que regrese a Canadá inmediatamente. Vamos a seguir trabajando con el Gobierno de Canadá para ayudar a obtener la liberación de Cy", agregó.