Las autoridades de Turbo, Colombia donde cientos de migrantes cubanos y de otras nacionalidades permanecen varados tras el cierre de la frontera panameña, intentan contener una crisis humanitaria que los escasos recursos de los que disponen no podría resolver.
Una de las medidas tomadas por el gobierno local ha sido ordenar el traslado de los migrantes irregulares al corregimiento de Capurganá, en Acandí, pero algunos cubanos se resisten a dejar Turbo, reporta este jueves Noticias RCN.
"Los cubanos persisten en quedarse en nuestro municipio, ellos saben que la frontera con Panamá está cerrada y no quieren salir del municipio", aseguró al medio local Emelides Muñoz, secretario de Gobierno de Turbo.
Según RCN, los cubanos prefieren dormir en las aceras y en el atrio de la iglesia antes de trasladarse a Capurganá, pues allí no ven las condiciones logísticas para esperar mientras reabren la frontera con Panamá.
Un grupo de cubanos, de los que al parecer ofrecen resistencia al traslado, dijo el jueves a Martí Noticias que permanecían rodeados por miembros de la policía y fuerzas de Migración en un parque en Turbo.
"Ellos nos quieren sacar del pueblo de Turbo, porque aquí no nos pueden tener", explicó Maydelín Hernández, una de las cubanas varadas en el lugar.
Muchos han decidido dejar Turbo por voluntad propia, y continuar camino en busca de una ruta para cruzar la frontera. Muñoz explicó a RCN que se dirigen a Sapzurro, donde esperan que los traficantes de personas los ayuden a llegar a Centroamérica a través de la selva.
Según el funcionario, ya habían salido de Turbo unos 411 migrantes, y se esperaba que otros 200 dejaran este jueves la localidad. Las autoridades desconocen la cantidad exacta de extranjeros que permanecen en el municipio, pues no existe un registro que se se pueda actualizar al ritmo de los acontecimientos.
“Los inmigrantes llegan todos los días a Turbo. Es súper doloroso ver a madres embarazadas, con niños de siete meses, que se arriesgan”, explicó Muñoz.
Autoridades locales piden ayuda al Gobierno
Vídeos divulgados en el perfil de Facebook de Nelson March, otro cubano varado en Colombia, ilustran la actual situación que viven los migrantes, quienes desde este miércoles disponían al menos de un albergue donde pernoctar.
El alcalde de Turbo, Alejandro Abuchar, advierte que la situación se tornará más difícil con el paso de los días, porque los migrantes siguen llegando, y la localidad no dispone de recursos suficientes para atenderlos.
Abuchar ha pedido el apoyo del gobierno de Colombia, que hasta el momento no se ha pronunciado de manera oficial sobre el tema.
Panamá devuelve a migrantes interceptados
Aunque el cruce fronterizo en Paso Canoas está vedado a los migrantes irregulares por orden presidencial estos continúan intentando entrar al país para seguir camino a Estados Unidos.
Este jueves, el director del Servicio Nacional de Fronteras de Panamá (Senafront), Cristian Hayer, informó que desde el pasado 9 de mayo han interceptado a cerca de 300 cubanos y africanos procedentes de Colombia y los han devuelto a ese país.
Hayer explicó que las rutas seguidas por los migrantes para entrar a Panamá han sido bloquedas, pero que han comenzado a utilizar otras que los conducen al poblado de Peñitas, reporta el diario La Prensa.
Este viernes, 20 de mayo, vence el plazo para que los cubanos varados en Panamá viajen a México a través del puente aéreo acordado entre los dos países. El Gobierno ha dicho que tras esa fecha no habrá más vuelos para el traslado de los migrantes.