“Lo más importante después del anuncio del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) sobre la suspensión repentina del Programa de Parole Humanitario ha sido la autorización de viaje para los beneficiarios aprobados”, dijo este miércoles el abogado Willy Allen en entrevista con la revista informativa Martí Noticias AM.
“Es por eso que recomiendo a esas personas que viajen lo más pronto posible”, insistió el experto, advirtiendo que aunque el programa es muy bueno, las comunicaciones entre las agencias federales no siempre son las mejores.
El gobierno de Estados Unidos suspendió de manera temporal los permisos de viaje para beneficiarios del programa implementado en enero de 2023 para Cuba, Haití y Nicaragua y en octubre de 2022 para Venezuela, tras la circulación de un informe interno que revelaba niveles significativos de fraude.
El abogado explicó que “el hallazgo de un número alto de fraude en estas aplicaciones eleva el asunto a un plano político, donde incluso se puede reabrir el caso judicial sobre el parole, que no fue ganado en corte”.
El pasado 8 de marzo, el juez federal Drew Tipton determinó mantener el programa que había sido demandado por 21 estados que acusaron al Departamento de Seguridad Nacional y a su titular, el cubanoamericano Alejandro Mayorkas, de violar la ley federal de inmigración y de una extralimitación del Poder Ejecutivo.
"Los estados demandantes (...) enfrentan daños sustanciales e irreparables por el abuso del Departamento de su autoridad de libertad condicional, lo que permite potencialmente que cientos de miles de extranjeros adicionales ingresen a cada uno de sus territorios ya abrumados", indicaba el documento de la demanda.
El abogado Allen explicó que actualmente hay más de dos millones de aplicaciones que no han sido revisadas.
"En las que ya fueron examinadas se halló fraude, por lo que creo que el programa no se pueda salvar fácilmente porque se desprende que el fraude era un esquema bien habilitado", opinó el licenciado.
El experto defendió ese mecanismo como una vía segura y ordenada para la migración pero “el diablo está en los detalles y mi temor es que el programa sea suspendido”.
Hasta el mes de julio, unos 106.757 cubanos se habían beneficiado del programa, y unos 104.130 ya habían viajado a EEUU y recibido el parole, según las cifras de las autoridades fronterizas.
En total hasta junio unos 494.799 cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos habían entrado a EEUU bajo este programa cuyos solicitantes deben tener verificaciones de antecedentes y un patrocinador financiero en Estados Unidos que responda por ellos.
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