Un grupo de estudiantes y profesores cubanos denunció a la viceministra primera de Educación Superior por discriminación y alertó sobre el aumento de medidas discriminatorias y punitivas por motivos políticos en las universidades cubanas.
La funcionaria Martha del Carmen Mesa Valenciano es autora del texto “Ser profesor universitario”, publicado a raíz de las protestas por el despido, en el mes de julio, de la profesora de Historia del Diseño del Instituto Superior de Diseño (ISDI ) Omara Ruiz Urquiola por motivos políticos.
En el escrito la viceministra condiciona el empleo de profesor universitario a mantener una alianza a la revolución y a los ideales de Fidel Castro (1926-2016).
“El que no se sienta activista de la política revolucionaria de nuestro Partido, un defensor de nuestra ideología, de nuestra moral, de nuestras convicciones políticas, debe renunciar a ser profesor universitario. Ser profesor universitario es a cada instante la definición de nuestro presidente “pensar como país”. Ser profesor universitario es defender el concepto de Revolución de nuestro Comandante (Fidel Castro).
En el documento "Carta al Gobierno de la República de Cuba, por estudiantes y profesores universitarios cubanos" se expresa temor de que el escrito de la viceministra se convierta en pretexto para institucionalizar actos que atenten contra los derechos humanos.
Al mismo tiempo se quejan de que no existe hasta el momento una declaración oficial sobre el pronunciamiento de la funcionaria que “hace abierta apología a la discriminación”.
“Ante tal silencio, estudiantes, profesores y ciudadanos manifestamos nuestro rechazo a que el derecho universal a la educación, al trabajo y la protección contra toda forma de discriminación consagradas en la Constitución cubana, se continúen violando en las universidades del país con cada persona expulsada de las mismas por razones políticas”.
En opinión de los firmantes las palabras de la viceministra vulneran la recién aprobada Constitución, desconocen los artículos 18 y 19 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, la Declaración Mundial sobre la Educación Superior en el Siglo XXI y otros tratados y convenios en el ámbito educativo que reconocen la libertad académica y la autonomía universitaria como condiciones indispensables para una universidad de calidad, plural, comprometida socialmente, democrática e inclusiva.
Por último reclaman a La Habana que vele porque se cumpla la legalidad y los protocolos y pactos internacionales de los que es signataria y que “honre sin distinciones, ni condicionamientos, los principios humanistas en los que debe fundarse la educación superior”.
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Los académicos Omar Ruiz Urquiola y Oscar Casanella ofrecen más detalles de esta iniciativa a Radio Televisión Martí |
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