Este lunes una jueza del sur de Florida halló sin lugar la moción presentada por la empresa de cruceros Carnival Corp para desestimar una demanda amparada en la Ley Helms-Burton.
La ley permite a estadounidenses y cubanoamericanos demandar a compañías cubanas y extranjeras con inversiones en la isla por tráfico de propiedades confiscadas sin compensación tras la llegada al poder de Fidel Castro en 1959.
La decisión del 7 de octubre es la tercera derrota que sufre Carnival, que llegó a operar tres líneas de cruceros a la isla, en el proceso que busca remuneración por el uso de la naviera de instalaciones en la terminal de cruceros del Puerto de La Habana.
"Los magistrados han considerado que Carnival carece de argumentos para someter una decisión sobre la cancelación del caso al Tribunal de Apelaciones del 11 distrito, con sede en Atlanta, en el estado de Georgia, antes de que el juicio llegue a su fin”, dijo a Radio Televisión Martí el asesor legal Nick Gutiérrez.
"Lo que los jueces han dicho a la empresa Carnival es que, si está tan convencida de que va a ganar el caso, que tiene argumentos convincentes, pues que lo dirima en los tribunales", agregó.
Carnival, dijo Gutiérrez, cuenta con los servicios de por lo menos cinco de los mejores bufetes internacionales de abogados, de los más costosos y poderosos del mundo.
La demanda fue radicada el pasado 2 de mayo, en el Tribunal Federal, distrito sur de Florida, por Mickael Behn, heredero de la familia dueña de Havana Docks Corporation.
El señor Behn ha iniciado también demandas contra Norwegian Cruise Line Holdings Ltd., Royal Caribbean International y MSC Cruises.
Consultada por Radio Televisión Martí, una fuente de esta compañía que pidió no revelar su nombre, dijo que la empresa no haría comentarios sobre el asunto porque hay un proceso judicial en curso.
Consulte el texto de la Ley Helms-Burton