De lo que no hay dudas en Cuba es de que la aplicación del Título III de la Ley Helms-Burton ha tenido efectos negativos para las inversiones extranjeras que busca el gobierno cubano, en eso coinciden los que apoyan y rechazan el embargo estadounidense.
"El impacto ha sido real en la medida en que ha ahuyentado a los inversionistas", dijo Manuel Cuesta Morúa, un líder de la oposición cubana que siempre ha estado en contra de las sanciones.
Por su parte, Antonio González Rodiles, coordinador del proyecto Estado de Sats, es de los que afirma que el régimen de La Habana se merece el embargo.
"Muchas compañías, muchas empresas extranjeras lo han pensado varias veces para venir a invertir en Cuba", indicó.
El Título III de la Ley Helms-Burton permite y de hecho abrió el camino para demandar a compañías extranjeras que al invertir dentro de Cuba lo hagan traficando con propiedades privadas confiscadas por el gobierno cubano en la década del 60.
El ejemplo más reciente es una demanda contra las tarjetas de crédito Visa y MasterCard por operar en hoteles de Varadero construidos en propiedad confiscada.
Un hecho así hace pensar a González Rodiles que la continuidad del Título III plantea un panorama difícil para el régimen de La Habana.
" Me parece que el escenario que estamos viviendo de cara al futuro plantea un reto aún mayor para el régimen cubano. En este contexto económico global y ahora con la pandemia, el capítulo III de la ley Helms Burton va a tener definitivamente mucho mayor impacto que este año que se ha cumplido".
Por el contrario Cuesta Morúa, del Partido Arco Progresista, afirma que el Título III es la justificación perfecta que está usando el gobierno cubano.
"Entonces claro que permite que el gobierno cubano sigue utilizando el embargo como la bolsa, el saco donde echa todas sus justificantes para explicar su inoperancia y su incapacidad, más bien su ineptitud", dijo Morúa.
El opositor, graduado de Historia de la Universidad de La Habana, también dijo que las sanciones son contraproducentes para un cambio político en la isla: "Si paraliza de alguna manera y crispa mucho más las posibilidades o el el ambiente para lo que es fundamental, que es propiciar un cambio y una transformación política al interior del país".
A un año de la implementación del Título III de la Ley Helms-Burton por lo menos 73 cubanoestadounidenses han presentado una veintena de demandas en cortes de Estados Unidos en busca de indemnización por sus bienes expropiados en Cuba.
