El Departamento de Estado de Estados Unidos propició este martes una discusión sobre el tema de los presos políticos cubanos a través de una charla abierta en Facebook Live.
El evento contó con la participación de Carlos Trujillo, Embajador de Estados Unidos en la Organización de Estados Americanos (OEA) y la abogada cubana Laritza Diversent.
Ambos debatieron sobre el trato que el régimen de Cuba da a los presos políticos, y sobre cómo la comunidad internacional puede exigir la toma de responsabilidad del régimen cubano por sus abusos de poder.
Diversent destacó la importancia de la solidaridad y la presión internacional en apoyo de los presos políticos y los activistas de derechos humanos y en ese sentido citó los casos del científico Ariel Ruiz Urquila y de Tomás Núñez Magdariaga.
En el caso de Núñez Magdariaga se evidencia la incoherencia del sistema judicial cubano, dijo Diversent, porque el documento que cita como razón para liberarlo “cambio de medida cautelar”.
“La medida cautelar es una figura que se aplica a un acusado, para imponerle una fianza, o no, pero Tomás ya había sido condenado”, explicó Diversent. “En su caso lo que procede es libertad extra penal o anulación de condena, pero él no tiene nada de eso, y no le han informado cual es su situación”, agregó.
Diversent explicó que la negativa del régimen a permitir el registro legal de las organizaciones opositoras de la sociedad civil las priva de recibir fondos de otros países, como es el caso de los miembros de la Unión Europea, que sólo ayudan a las organizaciones reconocidas en sus respectivos países.
"Estados Unidos es el único país que ayuda a financiar a la sociedad civil y grupos de derechos humanos en Cuba, y el régimen los acusa así de mercenarios", afirmó Diversent, y añadió que en América Latina y otros lugares del mundo decenas de organizaciones de la sociedad civil reciben ayuda de Estados Unidos, y no por eso son calificados de mercenarios.
En ese sentido, subrayó que la falta de registro legal de las organizaciones de la sociedad civil independientes incide incluso en las instancias de la Organización de Estados Americanos que, según sus reglas, solo puede invitar a sus eventos internacionales a grupos registrados.
“Nosotros no existimos para la OEA, ni siquiera contamos entre sus estadísticas, y es porque no estamos registrados dentro de Cuba”, concluyó Diversent.
La Oficina de Democracia, Derechos Humanos y Trabajo del Departamento de Estado desde el lanzamiento de la campaña #PresosPorQué ha sostenido que el Gobierno cubano silencia a sus oponentes y manifestantes con detenciones arbitrarias y acusaciones falsas.
"El estimado de 130 presos políticos en Cuba son un signo explícito de la naturaleza represiva del régimen", apunta un comunicado del Departamento de Estado.
"Responsabilizar al régimen cubano por las violaciones de los derechos humanos y apoyar las aspiraciones del pueblo cubano de vivir en libertad son componentes fundamentales del Memorando Presidencial sobre Seguridad Nacional (NSPM) emitido por del presidente Trump en 2017”, recuerda la nota oficial.