Estados Unidos destacó este jueves que a pesar de su estratégica situación geográfica Cuba no es “un gran consumidor, productor o punto de tránsito de las drogas” en el hemisferio.
"Pese a su proximidad a los mayores exportadores de drogas ilícitas en el hemisferio y al mercado de Estados Unidos, Cuba no es un gran consumidor, productor o punto de tránsito de las drogas", indica el informe anual sobre drogas del Departamento de Estado, relativo a 2016 y enviado este jueves al Congreso.
El informe destaca la puesta en marcha de los acuerdos entre Estados Unidos y Cuba para luchar contra el narcotráfico, que establece canales de comunicación directa entre la DEA y la Dirección Nacional Antidrogas (DNA) de Cuba, algo que se suma a los intercambios de información con la Guardia Costera estadounidense, que informa a las autoridades cubanas sobre navíos sospechosos de estar relacionados con el tráfico de narcóticos.
“Cuba dedica importantes recursos para prevenir el tráfico y consumo de drogas ilegales, por lo cual los traficantes regionales evitan a esa ruta”, indica el informe.
Citando las estadísticas más recientes, el informe dice que durante el año 2015, el gobierno cubano incautó 906 kilogramos (kg) de drogas ilegales, que incluyeron 182 kg of cocaina, 700 kg of marihuana, y 24 kg de aceite de hachís.
El documento agrega que en 2015 las autoridades cubanas detectaron la incursión sospechosa de 48 lanchas rápidas a lo largo de la costa sureste de la isla. Durante el mismo período la Aduana de Cuba informó la captura de 82 kgs de drogas, entre ellas 50 de cocaína, en un total de 59 operaciones realizadas en los aeropuertos del país.
"El aumento de la comunicación y cooperación entre Estados Unidos, Cuba y socios internacionales, especialmente en lo que se refiere a intercambio de información en tiempo real, podría llevar a una mayor interrupción del tráfico de drogas", indica el informe.
(Complementado con información de EFE)