El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence anunció este viernes nuevas medidas de presión económica sobre el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela, incluidas sanciones a dos compañías y un barco que entregó petróleo a Cuba en febrero y marzo.
“El petróleo de Venezuela pertenece al pueblo venezolano”, dijo Pence en un discurso pronunciado en el Instituto Baker, en Houston.
Cuba exporta tiranía y ha influido en el fracaso de Venezuela, señaló el vicepresidente, y anunció que en las próximas semanas EEUU tomará medidas adicionales contra el régimen de la isla. Pence añadió que para EEUU siempre será: ¡Qué viva Cuba libre!
Las dos compañías sancionadas operan en el sector petrolero venezolano y entregan petróleo a Cuba en el barco Despina Andrianna, dijo el Departamento del Tesoro.
Ballito Bay Shipping Incorporated, con sede en Monrovia, Liberia, y es el propietario registrado de la embarcación, mientras que ProPer In Management Incorporated, basada en la ciudad portuaria de Piraeus, Atenas, Grecia, es el operador del tanquero.
Las sanciones incluyen a 34 embarcaciones operadas por la empresa petrolera estatal PDVSA. La designación prohíbe que todo ciudadano o entidad estadounidense realice cualquier tipo de transacción financiera que las involucre.
"El Tesoro está tomando medidas contra las embarcaciones y entidades que transportan petróleo, proporcionando un salvavidas para mantener a flote el régimen ilegítimo de Maduro", dijo el secretario del Tesoro Steve Mnuchin en una declaración.
"Cuba continúa beneficiándose y apoyando el régimen ilegítimo de Maduro a través de esquemas de petróleo por represión mientras intenta mantener a Maduro en el poder", añadió Mnuchin.
Cuba es un importante importador de crudo de Venezuela y, a cambio, envía asistencia en forma de asesores políticos, oficiales de inteligencia y militares, y profesionales médicos, los cuales se utilizan para garantizar la permanencia de Maduro en el poder, y el control social completo sobre el pueblo de venezuela, añadió el Tesoro.
En su discurso en Houston, Pence subrayó que la dictadura de Nicolás Maduro está destruyendo un país que fue próspero y democrático, y criticó que el gobernante venezolano continúe bloqueando la entrada al país de cientos de toneladas de comida, medicamentos y productos de primera necesidad que EEUU ha enviado a las fronteras de Venezuela como ayuda humanitaria.
El vicepresidente dijo que miles de niños mueren de hambre, o por falta de medicamentos en los hospitales de Venezuela. Para que esta situación cambie en Venezuela “Nicolás Maduro debe irse”, insistió Pence.
El vicepresidente había adelantado el martes que EEUU Unidos continuaría presionando con sanciones económicas a la industria petrolera de Venezuela y los que la apoyan, como el régimen cubano, diciendo que los precios del crudo están lo suficientemente bajos como para tomar dichas medidas.
(Con información del Instituto Baker y Reuters)