El miércoles fue maltratado físicamente y enviado para una celda de castigo del penal de máxima seguridad Combinado del Este, el preso político Luis Armando Cruz Aguilera, según dijeron a Radio Martí fuentes familiares, que aseguran que otros dos jóvenes recibieron un castigo similar por gritar 'Patria y Vida' y 'Abajo Díaz-Canel' en la mayor cárcel de Cuba.
El joven de 23 años, quien cumple 10 años de condena por su participación en las protestas populares del 11 de julio de 2021 en la barriada de La Güinera, en el municipio capitalino de Arroyo Naranjo, se negó a la rehabilitación ideológica en el llamado “Plan Dignidad”, denunció su madre, María Celia Aguilera.
"Dos muchachitos más, que no sé exactamente el nombre, son de La Güinera, del 11 de julio, también fueron maltratados y llevados a la celda de castigo”, agregó Aguilera.
“Yo vi que en la mañana él no me llama, y por la tarde, me empezaron a llamar madres de presos comunes, (me dijeron) que fue un oficial; ese oficial siempre la ha tenido cogida con ellos diciendo la Operación Dignidad y que no tienen dignidad, le dijo 'Vamos, que te vas de aquí', y él le dijo "a mí me hablas bien y yo no me llamo Operación Dignidad, yo tengo mi nombre”, relató Aguilera.
La señora asegura que el oficial agresor es de apellido Biscet y que ya tiene un historial de abusos contra los presos políticos recluidos en esa cárcel.
La mujer dijo que el guardia del penal respondió, “No ustedes lo que no tienen es dignidad".
"Empezaron a tener unas palabras, el empujó a mi hijo, le puso unas esposas que son plásticas, mi hijo se las quitó, entonces lo esposó con las otras, fue lo que me estuvieron explicando los muchachos que le estuvieron explicando a los padres. Ahí, en ese momento, delante de los demás lo empujaron, sabe Dios lo que le hicieron cuando lo llevaron para la celda de castigo. Eso es en el edificio Uno, 2do. Norte, Compañía 1203”, señaló la madre del preso político.
“Por lo menos en el Combinado, donde está mi hijo, están haciendo eso. Muchos comunes se ponen a la par de los guardias, los agreden para buscarle otra causa, para eso es que ellos los están provocando. En estos momentos voy camino para allá, para que me den fe de vida de él, de allí no me voy a mover”, aseguró.
La mujer denunció que ha sido amenazada con que su hijo será transferido desde el Combinado del Este para Guantánamo si ella continúa denunciando en redes sociales la situación que enfrentan los presos del 11J.
El joven preso político relató a su madre que “la comida a veces está podrida, las chinches no lo dejan dormir y el hambre lo está matando”.
“La comida está malísima, la sopa que le dan es el agua de las papas, a veces no le dan arroz, lo que le dan es un bultico de papas que a veces están hasta ácidas, dice mi hijo”, indicó la mujer.
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