Familiares de la presa política Lizandra Góngora pudieron visitarla el sábado en la cárcel de mujeres de máximo rigor Los Colonos, en La Isla de la Juventud, adonde fue trasladada, distante de su esposo e hijos, quienes residen en Güira de Melena, en Artemisa.
Desde el puerto de Gerona, donde espera desde el sábado una embarcación para regresar a casa, Ángel Delgado, esposo de Lizandra, dijo a Radio Martí que la opositora está presentando problemas de salud.
Góngora tiene "un quiste en un seno". El viernes le realizaron un ultrasonido y el médico diagnosticó "que lo que tiene es grasa", pero la presa política se queja de dolor en la zona. Presenta, además, manchas en la piel, detalló el esposo.
"Querían darnos la visita en una biblioteca reducida... y no estuvimos de acuerdo con eso, y Lizandra se quería, incluso, hasta plantar", explicó Delgado. Tras la protesta, los funcionarios del centro penitenciario dispusieron que la visita tuviera lugar en "en el salón donde le dan la visita a todo el mundo".
Varios miembros de la familia pudieron ver a la presa política, entre ellos la madre, el padrastro, sus dos hermanos y un tío que llevaba días insistiendo para que le permitieran visitarla, aseguró Delgado.
A pesar de la lejanía del lugar, Delgado opina que su esposa "está mejor" en la cárcel Los Colonos. "Hay más condiciones, la comida está mejor elaborada", dijo. "Lo único malo es para mí. No hay pasaje, es un barquito que sale una vez al día y lo que lleva son 200 y pico de personas".
Lizandra Góngora fue condenada a 14 años de prisión por su participación en las protestas del 11 de julio de 2021 en Güira de Melena, en la provincia de Artemisa. Fue acusada de sabotaje, robo con fuerza y desorden público.
En Cuba hay un total de 74 presas políticas, según un reciente informe de la organización Justicia 11J, que ha hecho un llamado de atención sobre las condiciones que enfrentan las mujeres privadas de libertad en la isla.
Sobre el caso de Góngora, la organización recalcó la distancia que separa a la madre de cinco hijos de su familia, separada por mar y a más de 160 kilómetros de su familia.
"A este castigo fue sometida previamente la Dama de Blanco y miembro de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) Aymara Nieto, quien por dos años, hasta noviembre de 2022, estuvo en una prisión de Las Tunas, a más de 600 kilómetros de su familia, en La Habana. Se trata de un método del que fueron víctimas muchos de los presos de la Primavera Negra. Y también, recientemente, ha sido aplicado, entre otros, a George Ramírez Rodríguez, Daniel Moreno y Maikel Puig Bergolla", destacó Justicia 11J.
(Con reporte de Ivette Pacheco para Radio Martí)
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