La Policía de Colombia entregó este jueves a agentes de la policía de Inmigración y Aduanas de EEUU (ICE), para su traslado a ese país, al ciudadano colombiano Johan Estiven Carreazo Asprilla, alias 'Playboy', acusado de robar, asesinar y probablemente violar en 2016 a dos inmigrantes cubanos, informa el diario bogotano El Tiempo.
Según fuentes de la institución, 'Playboy' actuó en complicidad con Carlos Emilio Ibargüen Palacio, extraditado a finales del año pasado. Ambos cobraban 1.500 dólares por ayudar a inmigrantes a atravesar la frontera a Panamá, por trochas que salían desde el Golfo de Urabá.
Carreazo e Ibargüen, conocidos como “Playboy” y “Carlos”, serían parte de una red de tráfico internacional y estaban acusados de robar y matar a la joven cubana Edelvis Martínez Aguilar y a Dunieski Eliades Lastre Cedeño el 8 de septiembre de 2016.
Edelvis era contadora en una paladar de la capital cubana. Partió junto a su novio, Liover Santos Corria, de 35 años, hacia Guyana. Tras cruzar Venezuela y Colombia se encontraron con Dunieski, quien se había costeado el viaje mediante la venta de la casa de su madre en La Habana. Los tres viajaron a Capurganá para adentrarse en la selva del Darién, pasar a Panamá, llegar a México y finalmente a Estados Unidos.
En lugar de ello Edelvis y Dunieski fueron asesinados en la Ciénaga de Matutungo, departamento de Antioquia.
El testigo principal de la acusación fue el novio de la joven, Liover Santos Corría, quien relató que ellos contactaron a los coyotes “Playboy” y “Carlos”, les pagaron $500.00 dólares, enviados por un familiar de los cubanos desde Miami, y luego tuvieron que agregar $1.400 más “a otra persona de la red”.
Según el testimonio del sobreviviente, “Playboy” y “Carlos” sacaron un arma de fuego y un cuchillo, amarraron a los dos hombres y “los tiraron por la borda, pero los mantuvieron a flote y los anclaron con la cuerda a la parte interior de la embarcación”.
Santos explicó que vio como violaban y degollaban a su novia, pero logró escapar, esconderse en la selva y al día siguiente ser rescatado por pescadores que lo presentaron ante la Armada Nacional.
Los cuerpos de Edelvis y Dunieski fueron amarrados a un tronco y sumergidos en el río de la Ciénaga de Matuntugo. Los marineros que los recogieron pudieron ver que “les habían cortado el cuello y el estómago. Estaban amarrados juntos en el agua”, según refirieron entonces al diario El Espectador.
El director de Medicina Legal de Colombia, Carlos Eduardo Valdés, confirmó que en ambos casos las víctimas fueron atacadas con un elemento corto-contundente, pero descartó que hubieran sido "objeto de maniobras sexuales".
Al parecer Edelvis y Dunieski no fueron las primeras víctimas de estos 'coyotes' que además trabajaban como sicarios del 'clan del Golfo', una organización criminal conocida también como “Los Urabeños” que controla tanto el tráfico de personas como de narcóticos por la zona del Golfo de Urabá, fronterizo con Panamá.
Aunque se habló de que a los dos asesinos les esperaba cadena perpetua en Estados Unidos, los acuerdos de extradición con Colombia no lo permiten. En todo caso, están expuestos a penas superiores a 40 años.
(Redactado por Rolando Cartaya, con información de El Tiempo, El Espectador y 14yMedio)
