Idalia azotó el extremo occidental de Cuba con intensas lluvias y fuertes vientos, en particular la provincia de Pinar del Río, un territorio que aún no se recupera de la devastación causada en 2022 por el huracán Ian. Se reportaban inundaciones, la caída de árboles, cultivos anegados, el cierre de carreteras y cortes de electricidad en varios municipios. Las autoridades locales informaron que más del 60 por ciento de los clientes de Pinar del Río permanecían sin energía eléctrica como consecuencia de las afectaciones provocadas por el ciclón.