Durante el primer semestre del presente año, y sobre todo en los últimos 90 días, las autoridades cubanas, solamente en la capital, han retirado un total de 281 licencias a los trabajadores privados, además de la cancelación de 136 permisos de arrendamiento.
La mayoría de los afectados son arrendatarios de espacios en los diferentes mercados de La Habana, y las duras medidas aplicadas por inspectores se justifica con el argumento de "que están violando las normas sanitarias establecidas por la pandemia", así lo informó Luis Antonio Torres Iribar, presidente del Consejo de Defensa Provincial, según un reporte del diario estatal Tribuna de La Habana.
Esta situación contrasta con la escasez de alimentos en todo el país, agravada por el COVID-19. No hay carne de cerdo, tampoco frijoles, ni arroz, alimentos básicos en la mesa del cubano, situación que provoca un drástico incremento del costo de la vida en la isla.
Algunos de los más exitosos emprendedores privados en la nación actualmente cumplen condenas de prisión por delitos tales como “enriquecimiento ilícito” y “cohecho”, mientras otros regularmente enfrentan las confiscaciones de sus productos.
Esteban Hernández, coordinador para la región occidental de la Coalición de Cuentapropistas de Cuba (C-3), que agrupa a los trabajadores privados en múltiples sectores, denuncia que estas personas son tolerados, pero no aceptados por el estado. El gobierno, asegura, se aprovechó de la crisis sanitaria generada por el coronavirus para incrementar el hostigamiento contra ese sector emergente.
“No hay muchas alternativas, la mayoría de los cuentapropistas están laborado en las peores condiciones, necesitan vivir. Estamos hablando de transportistas, peluqueros, gastronómicos, mensajeros, carretilleros, entre otros, todos bajo el fuego de los inspectores”, añadió.
Según Hernández, C-3 ya se encuentra en la preparación de la documentación de esos abusos contra los privados para acudir a los diferentes organismos del estado, y también los tribunales, porque muchas de las medidas aplicadas son arbitrarias y las penalidades excesivas.
En una reciente publicación en su blog Cubaeconomía, el académico Elias Amor concluyó que el sector privado será el gran perdedor de la crisis del coronavirus en Cuba, mientras que el también economista Pedro Montreal, en su página El Estado como tal, expuso su preocupación ante las cancelaciones de las licencias a los privados. en su opinión, un sector que podría ser determinante para salir de la actual crisis económica.