La policía bielorrusa detuvo a más de mil personas el domingo durante las masivas protestas que exigían la renuncia del dictador Alexander Lukashenko y nuevas elecciones.
El grupo de derechos humanos Vyasna dijo que la mayoría de las detenciones se realizaron en Minsk, donde fuerzas de seguridad vestidas de negro utilizaron gases lacrimógenos y granadas paralizantes para dispersar a miles de manifestantes, informó Radio Europa Libre/Radio Libertad (RFE/RL).
Dos personas fueron golpeadas por agentes de seguridad enmascarados dentro de un mercado.
Al menos 23 periodistas, incluidos cuatro colaboradores del Servicio de Bielorrusia de RFE/RL, se encontraban entre los detenidos en Minsk y otras ciudades, según la Asociación de Periodistas de Bielorrusia.
Los manifestantes portaban banderas blancas, rojas y blancas que se han convertido en un símbolo de la oposición política en Bielorrusia.
También llevaban pancartas en conmemoración de Raman Bandarenka, un manifestante antigubernamental de 31 años que murió en un hospital el 12 de noviembre después de, según se informa, ser brutalmente golpeado por las fuerzas de seguridad.
