Los tribunales cubanos concluyeron dos semanas de audiencias judiciales contra los manifestantes detenidos por protestar pacíficamente el 11 de julio del 2021, junto a miles de ciudadanos que se lanzaron a las calles para pedir libertad y cambios políticos en la isla.
Algunos de los detenidos solo estaban grabando y publicando la protesta en las redes sociales, pero ahora enfrentan cargos de desacato, desorden público y sedición, entre otros. Por el supuesto delito de “sedición”, algunos de los acusados podrían recibir sentencias de hasta 30 años.
Familiares de los detenidos han sido amenazados y hostigados por la Seguridad del Estado por denunciar los “tratos crueles” hacia los detenidos y exigir su iberación.
Algunos de los detenidos solo estaban grabando y publicando la protesta en las redes sociales, pero ahora enfrentan cargos de desacato, desorden público y sedición, entre otros. Por el supuesto delito de “sedición”, algunos de los acusados podrían recibir sentencias de hasta 30 años.
Familiares de los detenidos han sido amenazados y hostigados por la Seguridad del Estado por denunciar los “tratos crueles” hacia los detenidos y exigir su iberación.
