Medios brasileños indican que una de las hipótesis más fuertes sobre la reacción del ex presidente Luiz Inacio Lula da Silva a la orden de prisión expedida ayer por el juez Sergio Moro es que no se vaya a entregar y espere a la Policía Federal (PF) en la sede del Sindicato de los Metalúrgicos del ABC, en São Bernardo do Campo, región metropolitana de São Paulo.
Lula (quien gobernó 2003-2010) tiene de plazo hasta las 17.00 hora local (20.00 GMT) de este viernes para presentarse ante la Policía Federal de
Curitiba, ciudad en la que deberá cumplir su condena.
El ex jefe de Estado fue condenado en 2017 por Moro a nueve años de cárcel por corrupción pasiva y lavado de dinero, pero la pena fue ratificada y ampliada a 12 años por el Tribunal Regional Federal de la Cuarta Región de Porto Alegre el pasado 24 de enero.
La Justicia le acusa de haber recibido un apartamento de lujo en la localidad de Guarujá, en el litoral de Sao Paulo, a cambio de beneficiar a la constructora OAS en la adjudicación de obras públicas ligadas a Petrobras.
Lula, un exobrero metalúrgico, pasó la noche reunido con aliados políticos en la sede del sindicato de los metalúrgicos donde analiza su estrategia ante su inminente encarcelamiento.
El expresidente durmió en la sala de la presidencia del sindicato y estuvo solo de las 2 a las 7 de la mañana, según confirmaron a Efe fuentes del instituto que lleva su nombre.
Según aliados que estuvieron con el ex presidente, Lula estaría considerando esperar a ver la magnitud de las manifestaciones en el lugar esta mañana y en las primeras horas de la tarde del viernes decidirá si cumple o no la determinación de Moro de presentarse a la Superintendencia de la PF en el estado de Paraná antes de las 5 de la tarde.
"Todavía no ha decidido", confirmó a la revista brasileña VEJA el diputado federal por São Paulo del Partido de los Trabajadores (PT) Paulo Teixeira.
Teixeira estuvo con el ex presidente y dijo que Lula "está tranquilo".
También habló a la prensa sobre la posibilidad de que el ex mandatario petista no se entregue. La diputada estatal Manuela D'Ávila, la pre-candidata del Partido Comunista a la Presidencia dijo que ésta será "una decisión exclusivamente de Lula".
De acuerdo con otro parlamentario petista, si la protesta fuera "entusiasta", ganaría fuerza la alternativa de obligar a los policías a atravesar la eventual multitud para cumplir el mandato judicial. En caso contrario, Lula sería más susceptible a la posibilidad de viajar a Curitiba y presentarse en la sede policial.
[Con información de Agencia EFE, redes sociales y Revista Veja]