Decenas de representantes del gremio médico mexicano rechazaron en una declaración conjunta la contratación de 500 médicos de cubanos, anunciada el lunes por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) tras su viaje a Cuba.
Representantes de 30 asociaciones y colegios de médicos de México criticaron el argumento del presidente de que serían contratados para atender el déficit del personal en las zonas más vulnerables de México y consideraron el convenio como una "falta grave" hacia los profesionales mexicanos, a quienes e manera injusta se les ha relegado, privilegiando a médicos extranjeros.
“Vamos también a contratar médicos de Cuba que van a venir a trabajar a nuestro país; esta decisión la tomamos porque no tenemos los médicos que necesitamos en el país”, dijo el mandatario al afirmar que también se enviarán médicos mexicanos a especializarse en la isla.
Los firmantes aseguran que en el país azteca sí "hay médicos con capacidad avalada por las Universidades de la República Mexicana, formados en el pleno conocimiento de las necesidades e idiosincrasia de nuestra población, algunos de ellos desempleados o empleados eventualmente con salarios muy bajos o en zonas de inseguridad extrema".
Por otra parte, señalan que resulta un agravio para el gremio médico mexicano el hecho de que "estos médicos extranjeros no reúnen las competencias requeridas, no tienen funciones debidamente especificadas, no cuentan con los requisitos establecidos por las leyes vigentes, así como carecen del aval de los colegios de profesionistas. Su intervención no ha representado beneficio para la atención de nuestra población y sí es una grave falta de equidad para los médicos de nuestro país".
Durante la pandemia, ambos gobiernos firmaron un contrato por valor de unos 12.692.940 millones de dólares contratando a 585 médicos cubanos.
La exportación de servicios médicos cubanos ha sido uno de los renglones más lucrativos para el régimen de La Habana, que por años ha conseguido jugosos contratos en Latinoamérica, el Caribe, África y Europa.
Muchos de los profesionales que han participado en estas llamadas "misiones de colaboración internacional" han denunciado el entramado entre el Ministerio de Salud y los gobiernos extranjeros como una "trata de personas", en la que los médicos, enfermeros y técnicos de salud reciben una ínfima parte de los pagos.
En junio del año pasado, el Parlamento Europeo aprobó una resolución que "condena las violaciones sistémicas de los derechos humanos y laborales cometidas por el Estado cubano contra su personal sanitario enviado a prestar servicios en el extranjero en misiones médicas, que vulneran los convenios fundamentales de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ratificados por Cuba".