El Gobierno español convocó hoy al embajador de Venezuela en Madrid, Mario Isea, para protestar por el "lenguaje ofensivo" del presidente Nicolás Maduro hacia el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, e instó a Caracas a dialogar con la oposición.
Maduro llamó ayer "bandido" y "protector de delincuentes y asesinos" a Rajoy, después de que el jefe del Ejecutivo español pidiera "justicia, derechos humanos y libertad para los presos políticos venezolanos", al cumplirse tres años del encarcelamiento del líder opositor Leopoldo López.
En respuesta a los insultos de Maduro, el Ministerio español de Exteriores convocó este viernes al embajador de Venezuela en España, Mario Isea, al que recibió el secretario de Estado para Iberoamérica, Fernando García Casas.
El Gobierno español calificó las palabras de Nicolás Maduro contra Mariano Rajoy como "lenguaje ofensivo, intolerable e injusto que no beneficia en nada a las relaciones bilaterales" e instó al Ejecutivo venezolano a que "de verdad tome medidas internas y hable con la oposición", según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores tras el encuentro con Isea.
Por su parte, el embajador venezolano declaró a los periodistas que fue una conversación serena, en la que expresó que "hay un problema de fondo que tiene que ver con una campaña sostenida estos últimos años contra el estado de Derecho y las instituciones en Venezuela".
Añadió que "las relaciones de respeto y de afecto entre los pueblos se mantienen si no hay injerencias". También el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, exigió este viernes a Caracas un mayor compromiso con el diálogo con la oposición y con el bienestar de los venezolanos, en lugar de hacer declaraciones "ofensivas e injustas".
"El Gobierno de Venezuela, en lugar de hacer declaración de un tono o de otro, lo que debe hacer es trabajar seriamente por restablecer ese diálogo, por hacer avanzar la democracia en Venezuela y por mejorar la situación de los venezolanos", afirmó Dastis desde Bonn (Alemania), donde participa en una reunión de ministros de Exteriores del G20.
Esta es la sexta vez desde diciembre de 2014 que España convoca al embajador de Venezuela, la última el pasado 8 de abril, cuando Maduro llamó a Rajoy, "racista, basura corrupta y basura colonialista". Las otras ocasiones fueron el 22 de enero de 2016, el 27 de julio de 2015, el 15 de abril de ese mismo año, el 22 de abril de 2015, siempre por declaraciones de Maduro contra el jefe del Ejecutivo español.
La primera vez que el Ejecutivo de Rajoy convocó al representante diplomático venezolano fue el 13 de diciembre de 2014 cuando el secretario de Estado para Iberoamérica, Jesús Gracia, transmitió el malestar de España al encargado de Negocios, Julio García Jarpa. La reunión fue con el segundo de la legación diplomática porque el embajador fue llamado a consultas a Caracas por Maduro "en el marco del proceso de revisión integral" de sus relaciones con España, después de que Rajoy recibiera como líder del PP a Lilian Tintori, esposa del opositor López.
El Gobierno español es un firme defensor de la libertad de Leopoldo López, líder del partido Voluntad Popular, condenado en 2015 a casi catorce años de prisión por delitos de instigación pública, asociación para delinquir e incendio, en relación con los incidentes violentos registrados durante una marcha antigubernamental que había convocado en febrero de 2014.
Hoy mismo, el portavoz del Ejecutivo, Íñigo Méndez de Vigo, afirmó que España quiere "lo mejor" para los venezolanos y Venezuela", donde viven unos 200.000 españoles, pero lamentó la sentencia de ayer del Tribunal Supremo de Justicia del país latinoamericano que ratificó la condena de casi catorce años de prisión al líder opositor.
(Con información de la agencia EFE y AP)
