El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció el jueves que su gobierno reactivará la solicitud formal a Estados Unidos para que extradite al anticastrista cubano-venezolano Luis Posada Carriles, acusado de planificar la voladura en 1976 de un avión cubano en el que murieron 73 personas.
"He dado la orden a la canciller (...) para que retomemos con más fuerza que nunca la solicitud judicial, legal de extradición de Luis Posada Carriles desde la Florida", dijo Maduro durante un acto en Caracas donde el chavismo conmemoró la voladura del avión hace 40 años.
El mandatario afirmó que Posada Carriles está "conspirando" "impune" contra su gobierno y el de Raúl Castro en Cuba "protegido por el Gobierno de los Estados Unidos", por lo que espera que la nación norteamericana lo extradite al país caribeño "para terminar de juzgarlo y castigarlo".
"(Posada está) caminando por la calle 8 de Miami, luego de haber confesado ante el New York Times hace muchos años que sí participó y fue el cerebro del asesinato de estos 73 seres humanos", sostuvo. Maduro manifestó además su intención de escribirle al presidente de EEUU, Barack Obama, para que atienda esta solicitud antes de que termine su administración en enero próximo.
"Por mandato y obligación que tiene antes las leyes internacionales (...) y ante un acuerdo obligante del tratado de extradición con Venezuela, presidente entregue a este terrorista para ser juzgado en Venezuela y castigado por los crímenes que cometió contra nuestro pueblo", agregó Maduro.
Los Gobiernos de Cuba y Venezuela han reclamado durante años a Posada Carriles, antiguo agente de la CIA, como autor intelectual del atentado contra un avión comercial cubano en octubre de 1976, en el que murieron 73 personas.
El anticastrista Orlando Bosch y Posada fueron detenidos en Venezuela luego del atentado y juzgados en relación con este, junto con los venezolanos Hernán Ricardo y Freddy Lugo, por una corte militar que los absolvió. El juicio luego fue anulado. Posada escapó de la cárcel en Venezuela antes de que concluyera el segundo juicio en un tribunal civil, en el que Bosch fue absuelto. Solo Ricardo y Lugo fueron encontrados culpables.
Posada se refugió en EEUU después de huir de Venezuela y, años después, admitió en una célebre entrevista con la periodista Ann Louise Bardach su responsabilidad en los atentados con explosivos perpetrados en 1997 en varios hoteles de Cuba, uno de los cuales cobró la vida de un turista italiano.
Bardach luego presentó en un proceso de inmigración contra Posada Carrilles grabaciones de la entrevista.
Los abogados de Posada por su parte introdujeron una nota que presuntamente entregaron con posterioridad a la reportera en la que su defendido aclaraba que ni aceptaba ni negaba su responsabilidad en los atentados.