Dos jóvenes fueron multados por criticar al régimen cubano: uno en Isla de Pinos y el otro en el extremo oriental en la ciudad de Baracoa, según confirmaron ambos este lunes a Radio Televisión Martí.
David Gómez Sánchez, residente en Nueva Gerona, fue sancionado por el decreto 141 con 30 pesos y amenazado por un policía de esa localidad.
“Dentro de mi hogar grité ‘Abajo la dictadura’, a los cuatro vientos. Minutos más tarde fui trasladado hacia la estación policial donde fui entrevistado por un mayor, que nunca se presentó, y que me propuso ser dirigente, a lo cual respondí negándome. Al ver que no llegábamos a un acuerdo, el oficial decidió ponerme una multa de 30 pesos por “alteración del orden público” y me levantó una carta de advertencia”, dijo el activista perteneciente al Partido Autónomo Pinero.
“Hoy mi familia está dividida y aterrada, porque las mismas autoridades se han encargado de fomentar el miedo en ellos. A mi mujer le afirmaron que iba a pasar de 5 a 8 años en prisión por ser mi cómplice y a mi madre que yo iba a sufrir una condena de 30 a 35 años”, lamentó.
Asimismo, Yoel Acosta Gámez, de Baracoa, fue multado con 3 mil pesos bajo el Decreto 370 y amenazado con ser acusado por los delitos de “usurpación de funciones” y “peligrosidad social predelictiva”.
“Iba a visitar a mi madre. Fui interceptado por dos policías uniformados y un agente de la Seguridad del Estado. Me condujeron hacia la unidad de la PNR sin ninguna justificación. Al llegar, un Teniente Coronel llamado Elizardo, jefe de Instrucción Penal y un oficial del Departamento de Seguridad del Estado conocido como Rogelio, me dijeron que estaba detenido porque tengo una acusación por ‘usurpación de funciones”, denunció el integrante de la Alianza Democrática Oriental y reportero de Palenque Visión.
Acosta Gámez había publicado en el medio digital ADN Cuba videos y entrevistas en los que residentes de barrios pobres denuncian la situación en que viven.
“Son personas que están, totalmente, abandonados acá en la ciudad de Baracoa y que ellas mismas, por su propia voluntad, me pidieron que divulgara las condiciones precarias que soportaban ya que el gobierno no atendía sus necesidades y demandas”, explicó.
“La multa de 2 mil pesos que me impusieron debo pagarla en 72 horas, de lo contrariovoy a ser puesto a disposición de los tribunales e iré a prisión. También me amenazaron con hacerme un índice de “peligrosidad social pre delictiva” si seguía haciendo ese tipo de trabajos”, aseguró el comunicador.
El Grupo de Trabajo de Naciones Unidas sobre la Detención Arbitraria recientemente indicó que los arrestos sin justificación legal y las persecuciones sonuna práctica sistemática en Cuba contra la población civil.