Este miércoles cuando se espera que el Congreso certifique los resultados del Colegio Electoral que darían la victoria al demócrata Joe Biden, una multitud de partidarios del presidente Donald Trump se han congregado en Washington para mostrar su apoyo al republicano y denunciar lo que consideran una elección corrupta.
El presidente de Estados Unidos habló a sus seguidores desde la explanada pública de la Casa Blanca a quienes dijo: "Nunca nos daremos por vencidos, nunca cederemos".
En un momento de su discurso estimó que se habían reunido más de 250 mil personas en el Washington Mall y les pidió que marcharan por Pennsylvania Avenue hasta el Capitolio.
"Ahora vamos a ir caminando al Capitolio (...). Demandamos que el Congreso haga lo correcto y sólo cuente los electores de los votos válidos. Marcharemos de manera pacífica y patriótica", dijo Trump.
Aclamado por la multitud, Trump afirmó: "Nuestro país ya ha tenido suficiente, no lo vamos a aguantar más" y una vez más prometió "detener el robo".
La "Marcha para Salvar América" convocó desde el martes a miles de personas en Washington, incluidos algunos grupos que se enfrentaron con la policía.
Los manifestantes, al igual que el presidente Trump, consideran que hubo fraude en los comicios del 3 de noviembre, pero varios tribunales han rechazado los desafíos legales del equipo de Trump.
En su discurso el mandatario dijo que espera que el vicepresidente Mike Pence, en su papel al frente del Senado, bloquee el conteo del Congreso.
“Espero que Mike haga lo correcto. Yo espero que sí. Eso espero, porque si Mike Pence hace lo correcto, ganaremos las elecciones ”, dijo Trump.
"Todo lo que el vicepresidente Pence tiene que hacer es recertificar y nosotros nos convertimos en presidente y ustedes son las personas más felices", declaró.
En las últimas horas, las autoridades policiales informaron sobre el arresto de al menos una decena de personas por cargos que incluían posesión de armas y municiones, agredir a un oficial de policía y poseer una pistola paralizante.
Las calles de Washington fueron cerradas y la alcaldesa Muriel Bowser llamó a la Guardia Nacional por temor a que se repitieran los actos de violencia entre los grupos de protesta.
Las tiendas del centro han sido tapiadas y los miembros de la Guardia Nacional ayudarán a la policía de DC y del Parque Nacional a controlar las multitudes el miércoles.
Decenas de legisladores republicanos de ambas cámaras se mantienen fieles a Trump y han prometido hacer oír sus reclamos en el mismo Capitolio.
