La Organización Democrata Cristiana de las Américas (ODCA) demandó este lunes el fin del exilio forzado de los cubanos e hizo un llamado a la comunidad internacional a respaldar el derecho de los nacidos en Cuba a vivir en su patria.
"Uno de los derechos más vulnerados durante el actual régimen totalitario cubano es el derecho de los cubanos a vivir en su propia Patria y, consecuentemente, el derecho a circular y residir en el lugar del país que prefiera y el derecho a entrar y salir libremente de su país, tal como lo consigna el artículo 13 de la Declaración Universal de Derechos Humanos", señaló la organización en un comunicado.
ODCA se refirió al caso al caso del ex prisionero político Regis Iglesias Ramírez, Portavoz del Movimiento Cristiano Liberación, al que no dejaron entrar a Cuba en diciembre a pesar de tener todos sus documentos en regla.
La Organización Demócrata Cristiana de América reiteró que la práctica del exilio forzoso ejecutada por las autoridades cubanas es una franca violación a los principios del derecho internacional.
"Si hay un derecho que, en principio, es absoluto, es el derecho a vivir en la patria, ya que según la doctrina internacional es un atributo de la personalidad, al igual que el nombre y la nacionalidad. La mantención de esta facultad es, por tanto, contraria al derecho internacional y solo un mecanismo de las dictaduras para mantener fuera de su territorio a los disidentes políticos", subrayó.
Todas las convenciones internacionales -advierte ODCA- prohíben la expulsión de los nacionales y excluyen la posibilidad de restringir el ingreso al país donde se nace. La organización demanda al régimen de La Habana "que levante la medida que impide el ingreso a Cuba a todos los disidentes cubanos y restablezca el derecho a regresar y vivir en Cuba".
La entidad continental reafirmó, además, "la necesidad de restablecer todos los derechos ciudadanos del pueblo cubano".
En noviembre pasado, cuatro relatores de Naciones Unidas denunciaron ante esa organización la existencia de un “patrón de persecución” contra defensores de derechos humanos, activistas y periodistas críticos con el régimen en Cuba y la coacción sistemática para forzarlos a salir del país.