El número de “represores” cubanos que han entrado a Estados Unidos en el último año se ha multiplicado por cinco, dijo este martes la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba (FHRC, por sus siglas en inglés), una organización independiente que sostiene un proyecto para identificar a quienes han cometido violaciones a los derechos humanos en la isla.
“Hemos identificado más de 1.000 represores del régimen cubano y más de 115 que han entrado el último año a este país, muchos de ellos mintiendo”, dijo Tony Costa, el director de la Fundación.
El congresista de Florida Carlos Giménez, quien junto a sus colegas republicanos ha escrito varias cartas al Departamento de Seguridad Nacional sobre el tema, aseguró que la llegada de represores a EEUU afecta no solo a la comunidad cubana, sino también a la nicaragüense y venezolana.
“Hay también personas del régimen autoritario de [Nicolás] Maduro que son inelegibles para estar aquí en los Estados Unidos y lo mismo está sucediendo con Nicaragua. Si eran parte de la opresión de esos regímenes, esas personas no deberían tener derechos a tener las libertades de las que gozamos aquí”, dijo el congresista cubanoamericano.
“Si lucharon tanto por los regímenes cubano, venezolano o nicaragüense, que se queden en Cuba, Venezuela o Nicaragua”, añadió el legislador republicano.
Giménez mencionó casos como el de la fiscal Rosabel Roca Sampedro, quien pidió años de prisión para los jóvenes que se manifestaron el 11 de julio de 2021 en Cuba, y el de Manuel Menéndez Castellanos, ex secretario del Partido Comunista de Cuba en Cienfuegos, quien llegó recientemente a Miami por reunificación familiar.
“Tengo información de que los van a deportar”, dijo Giménez, sin ofrecer más detalles.
El éxodo de represores se ha incrementado con el aumento de la inmigración, dijeron Rolando Cartaya y Luis Domínguez, dos de los investigadores que llevan la lista de represores de la FHRC.
“Comenzamos viendo el incremento de los represores en la llegada masiva por la frontera sur de EEUU, tras el éxodo masivo a través de Nicaragua que ha traído a más de medio millón de cubanos a Estados Unidos y luego continuó en programas como el parole humanitario”, dijo Cartaya.
La FHRC presentó los testimonios de algunas de las víctimas de la represión en Cuba que hoy conviven con sus victimarios en EEUU.
“Hay un sentimiento que prima sobre todo y es el de rechazo”, dijo el periodista independiente Roberto Quiñones Haces, quien estuvo preso por ejercer su profesión en Cuba y hoy afirma que conoce a dos de sus represores que viven en EEUU, país donde él se exilió en 2021.
También contó su experiencia Samuel Rodríguez, quien contribuyó a denunciar a la jueza Melody González Pedraza, responsable, entre otros casos de condenar a prisión a cuatro jóvenes por protestar contra el gobierno.
González Pedraza viajó a EEUU, donde se encuentra detenida por las autoridades de inmigración a la espera de una audiencia de asilo político.
“Espero que de verdad de aquí salga algo serio. Hemos oído muchas promesas, pero queremos acciones”, dijo Rodríguez.
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