Los tres opositores que el 26 de julio de 2017 realizaron una protesta pública en la Catedral de Santiago de Cuba ahora enfrentan una acusación por supuesta Peligrosidad Social Pre-Delictiva, informó desde esa ciudad Marcos Díaz, representante de la Plataforma Candidatos por el Cambio.
Se trata de Alberto de la Caridad Ramírez Baró (48 años de edad) y sus hijos Leonardo (23) y Alberto Antonio Ramírez Odio (25), quienes enarbolaron una pancarta en contra de Raúl Castro y el régimen de La Habana.
Luego de la protesta pública del 26 julio de 2017 los tres opositores fueron acusados de “desorden público y Propaganda enemiga", y condenados a 5 años de prisión. Sin embargo, fueron liberados sin cargos tres meses después, el 18 de octubre de ese año.
Desde entonces los disidentes ha denunciado acoso y persecución policial, un registro domiciliario, detenciones arbitrarias y varios días de vigilancia en sus viviendas por parte de la Seguridad del Estado y las brigadas de Respuesta Rápida.
Este jueves el activista Marcos Díaz dijo al programa Cuba Al Día, de Radio Martí, que la situación que enfrentan en estos momentos es alarmante, ya que quien los acusa es la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) y la Seguridad del Estado se ha desentendido del caso.
“El oficial ‘Richard’ dice que no, que eso no es problema de ellos (la Seguridad), que eso es problema de la policía, que en el barrio se emiten muy malos criterios de ellos y la policía es quien los está acusando por un índice de Peligrosidad”, explicó Díaz.
Según detalló el disidente, el oficial los citó el 24 de abril a la 1era unidad policial. Allí fueron separados en el orden y destinos siguientes: el padre quedó en la 1ra unidad; Leonardo y Alberto Antonio se encuentran en la 2da unidad conocida como El Palacete y la 3ra.
