Cubanos residentes de Santa Cruz del Sur, Camagüey, salieron a las calles en la noche del domingo para exigir no solo el restablecimiento del servicio eléctrico, sino el cese de la dictadura.
El activista y residente de Santa Cruz del Sur, René Fernández Quiroga, habló con Radio Televisión Martí y explicó que lo que comenzó como una protesta de tres o cuatro personas, se convirtió en una manifestación de más de 500.
"El director de Radio Santa Cruz del Sur intentó confrontar la manifestación y tuvo que salir huyendo porque el pueblo le fue arriba", relató el activista.
"Miren esto, aquí todo el mundo salió pa' la calle que no se diga, está bueno ya, que los niños están sin comer caballero", dijo una manifestante en un video publicado por Mag Jorge Castro.
"(Algunos manifestantes) llevaban a sus niños también a la manifestación y entonces ellos, las autoridades y la dictadura, dicen que van a juzgar a los padres por corrupción de menores", informó Fernández.
Entre las consignas que gritaron los manifestantes al ritmo de las cacerolas se escucharon: "¡Pongan la corriente, pin#@!","Libertad","¡Abajo Canel!", "¡Abajo los barrigas llenas de allá arriba", "No queremos más comunismo".
Hasta el momento se desconoce el saldo de detenidos, pero el activista aseguró que la ofensiva represiva del régimen comenzó esta mañana. "Un vecino cerca de mi casa, un muchacho joven que debe tener alrededor de 24 años más o menos y es músico de la banda de Santa Cruz, está detenido", denunció el opositor.
La noche del sábado también se registraron protestas del pueblo. Hubo una manifestación en el parque principal de Jagüey Grande, Matanzas, frente a la Asamblea Municipal del Poder Popular, en la que una multitud salió con sus calderos.
Al parecer, la protesta pretendió exigir a las autoridades una solución a los apagones y criticar la gestión gubernamental. La respuesta del régimen condujo a un despliegue policial por las calles de Jagüey Grande.
En las últimas semanas han ocurrido protestas en varios puntos de Cuba después de que con el paso del huracán Ian en el occidente del país ocurriera un apagón nacional por varios días.
Los manifestantes se quejan de que no solo es la falta de electricidad sino de las consecuencias que conlleva eso: el azote de los insectos en las noches y la putrefacción de los alimentos por la falta de refrigeración.
Estas protestas, que empezaron en varios puntos de La Habana, han dejado un saldo de al menos cuatro decenas de detenidos, algunos golpeados y procesadas judicialmente como represalia, informó el grupo independiente Justicia 11J.
La respuesta del gobierno cubano ha sido criticada por organizaciones como Amnistía Internacional y Human Rights Watch.
"Hay indicadores preocupantes de que las autoridades están repitiendo las tácticas represivas que utilizaron durante décadas y también durante la represión de los manifestantes del 11 de julio del año pasado", advirtió Amnistía en un comunicado de prensa.
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