El sacerdote católico Castor José Álvarez Devesa, un abierto crítico al régimen castrista, fue golpeado y detenido en las protestas en Camagüey.
Tras ser liberado hizo un llamado a rezar por todos los detenidos en el levantamiento nacional contra el régimen comunista: "Yo creo que debemos seguir rezando por todos los que todavía están detenidos para que haya justicia con ellos, para que no vaya a haber excesos y que podamos nosotros los cubanos encontrar el camino de la paz y la libertad".
"Deseo de que todos los cubanos estemos en paz. Que no haya violencia, que no haya esa fuerza que oprime de sino que tengamos la paz y la justicia", afirmó el religioso.
“Ayer me puse a rezar para ver qué hacía y no pude llegar a mi casa, entonces es que me dirigí donde estaban los manifestantes a acompañarlos", explicó en un video publicado en redes sociales.
"Traté de evitar que hubiera confrontaciones, violencia. Al final, tratando de evitar una violencia hacia alguien he recibido un golpe con un bate", indicó el sacerdote.
"Estamos bien, gracias a Dios, y con el deseo de que todos los cubanos estemos en paz, que no haya violencia. Que tengamos la paz y la justicia", declaró el cura.